7 pasos para lidiar con la crítica

Roman Demkiv/Shutterstock
Fuente: Roman Demkiv / Shutterstock

Cuando se trata de críticas, sin duda es mejor dar que recibir. A nadie le gusta que lo critiquen, y estamos obligados a responderle mal. Estamos todos conectados para la defensiva; es una respuesta normal y casi universal a la crítica, pero también es el archienemigo de la intimidad y la conexión. Nuestro poder personal se basa en que lo marquemos.

Seguir estos 7 pasos puede ayudarlo a evitar que su respuesta se intensifique, y cambiar sus relaciones, pero cada uno requiere motivación, buena voluntad y práctica.

1. Reconoce tu actitud defensiva.

Escuchamos a la defensiva cuando escuchamos con lo que no estamos de acuerdo. ¿Bajo fuego? Obsérvate cuando veas que te estás enfocando solo en las inexactitudes, distorsiones y exageraciones que inevitablemente estarán ahí.

2. Respire.

La actitud defensiva comienza en el cuerpo. Nos pone tensos y en guardia, incapaces de escuchar y tomar nueva información. Tome respiraciones lentas y profundas, y haga lo que pueda para calmarse.

3. Escuche solo para entender.

Escuche solo para descubrir con lo que puede estar de acuerdo. No interrumpa, discuta, refute o corrija hechos, ni plantee sus propias críticas y quejas. Si sus puntos son legítimos, esa es una razón más para guardarlos para otro momento, cuando pueden ser un foco de la conversación y no una estrategia de defensa.

3. Discúlpate por tu parte.

La capacidad de disculparse indica a la parte crítica que usted es capaz de asumir la responsabilidad, no solo de evadirla. También ayudará a cambiar el intercambio del modo de combate a la colaboración. Guarde sus pensamientos sobre su parte hasta más tarde.

4. Deje que la persona crítica o enojada sepa que continuará pensando sobre la conversación.

Incluso si no se ha resuelto nada, dígale a la otra persona que se toma en serio sus pensamientos y sentimientos: "No es fácil escuchar lo que me está diciendo, pero quiero que sepa que le voy a dar una Mucho pensamiento ".

5. No escuches cuando no puedas.

Está bien decirle a la otra persona que desea tener la conversación y que usted reconoce su importancia, pero no puede tenerla ahora mismo: "Estoy demasiado cansado y preocupado como para realmente escuchar". Ofrézcale un momento específico para volver a hablar. -Abra la conversación, para que pueda darle su mejor atención.

6. Habla tus propias verdades.

Necesita decirle a la persona crítica cómo ve las cosas de manera diferente. No ayudará a su relación a entrar en el patrón de ser un tipo de persona excesivamente complaciente, de paz a cualquier precio, que evita el conflicto a toda costa. Aún así, el tiempo y el tacto son todo. Por lo general, es mejor guardar su punto de vista diferente para una conversación futura, cuando tendrá más posibilidades de ser escuchado. Recuerde que incluso las cosas más difíciles se pueden decir con amabilidad.

7. Dibuja la línea en insultos.

Puede haber un momento para sentarse a través de una explosión inicial, pero no si la rudeza se ha convertido en un patrón en su relación, en lugar de una ocurrencia poco común. Sal de la rudeza, mientras ofreces la posibilidad de otra conversación: "Quiero escuchar lo que te molesta, pero necesito que te acerques a mí con respeto".

En ¿ Por qué no te disculpas ?, le explico cómo la escucha sincera está en el corazón de la buena disculpa, y es esencial para reparar grandes traiciones y daños cotidianos. La escucha incondicional también está en el corazón del éxito de la relación, en el hogar y en el trabajo. En general, estamos más interesados ​​en agudizar nuestras habilidades para hablar en lugar de nuestras habilidades para escuchar. Pero esto es lo que me han enseñado cuatro décadas de estudio de las relaciones: cómo escuchamos es el factor determinante de cómo van nuestras relaciones, y si la otra persona está contenta de vernos al final del día.