7 razones por las que es difícil criar niños mentalmente fuertes

Stephen Coburn/Shutterstock
Fuente: Stephen Coburn / Shutterstock

En la superficie, podría parecer que los padres de hoy lo tienen más fácil que nunca. Después de todo, ya no tienes que bajar al río para lavar la ropa. Claramente, la sociedad moderna ofrece ventajas que facilitan la salud de sus hijos. Pero al mismo tiempo, el mundo digital en realidad puede hacer que sea más difícil criar a niños que están equipados para enfrentar los desafíos de la edad adulta.

Se necesita fortaleza mental para criar niños que se convertirán en adultos responsables. Aquí hay siete razones por las cuales es más difícil que nunca ser un padre mentalmente fuerte en el mundo de hoy:

1. La felicidad está de moda.

No tiene que ir muy lejos para encontrar libros o artículos que le cuenten los pasos que puede seguir para criar niños felices. Y aunque la felicidad es un gran subproducto, no debería ser el objetivo.

Dejar que su hijo coma cantidades interminables de helado y jugar videojuegos las 24 horas del día lo hará feliz en este momento. Pero a largo plazo, él será miserable. Es importante concentrar buena parte de su esfuerzo en enseñar a los niños habilidades que no necesariamente los harán felices en este momento. La autodisciplina, el control de los impulsos y la regulación emocional son esenciales para la felicidad a largo plazo.

2. Las redes sociales alimentan la competencia de crianza.

La mayoría de los padres desean compartir imágenes de sus hijos disfrutando de las vacaciones familiares, participando en deportes y recibiendo premios en Facebook e Instagram. Pero en lugar de deleitarse con su alegría, mirar a otras familias felices puede desatar la competencia entre los padres que quieren mostrar cuán asombrosos son también sus hijos.

Es difícil compartir la imagen de que su hijo está agradecido o superando sus dudas. Entonces, incluso si su hijo es amable y afectuoso, puede caer en la trampa de pensar que tiene que presumir de su último logro tangible. Y de repente, su actividad en línea puede convertirse en una competencia para demostrar quién cría a los "mejores" niños. Pero criar niños mentalmente fuertes se trata de ayudarlos a convertirse en las mejores versiones de sí mismos, no a ser mejores que los demás.

3. A los padres no se les enseñó habilidades de fortalecimiento de la fuerza mental.

Si usted era un niño de latchkey que creció en los años 80, o si usted es un milenio criado por alguien que cree que los niños deben ser vistos y no escuchados, hay una gran posibilidad de que sus padres no estén sentados hablando de sus sentimientos. Algunas familias enfatizaban la obediencia y las opiniones de los niños no importaban. Otros padres simplemente no tenían el conocimiento de la fuerza mental para transmitirlo. Si nadie te enseñó a desarrollar la autodiscusión saludable y cómo regular tus emociones, es difícil transmitir esas habilidades a tus hijos.

4. Demasiados padres con helicópteros hacen que sea difícil dejar que los niños fallen.

Si un niño olvidó hacer su tarea hace 25 años, no fue un gran problema. Todos los niños olvidaron sus tareas a veces. Una vez que los padres de helicópteros entraron en escena, los niños dejaron de cometer errores porque sus padres no los dejarían fallar. Entonces, una tarea perdida o unas zapatillas de baloncesto olvidadas significan que su hijo podría quedarse atrás. Pero las consecuencias naturales pueden ser el mejor maestro de la vida. Es importante dejar que los niños experimenten fallas y contratiempos para que puedan aprender cómo recuperarse.

5. La vergüenza de los padres incita al miedo.

Las personas son rápidas en juzgar las opciones de crianza de los demás. Si alguien avergüenza a un "amigo" de Facebook que no le da fruta orgánica a sus hijos, o si un lector deja un comentario que dice que el divorcio de una celebridad les dejará cicatrices de por vida, la vergüenza de los padres es un problema real.

Nadie quiere enfrentar ese tipo de escrutinio. Entonces, en un intento por evitar parecer un padre "malo", muchas madres y padres están cambiando sus hábitos. En lugar de dejar que su niño en edad preescolar haga una rabieta cuando le dicen que no puede comer dulces, los padres se están rindiendo para detener el llanto. O en lugar de dejar que un niño obtenga una mala calificación, los padres están corrigiendo la tarea de sus hijos. Y esas pequeñas opciones de crianza marcan una gran diferencia en la capacidad de los niños para desarrollar la resiliencia.

6. Las compañías de marketing se aprovechan de la culpabilidad de los padres.

Los anuncios le dirán que usted es una buena madre, siempre y cuando le compre ciertos juguetes a su hijo. Y que eres un padre increíble, siempre y cuando lleves a tus hijos a cierto parque temático. Las empresas saben que los padres se sienten culpables por no pasar suficiente tiempo con sus hijos, por no brindarles todas las ventajas competitivas posibles y por no darles todas las cosas que necesitan para ser felices. Y se aprovechan de esa culpa para venderte cosas que no necesitas.

Ya sea que haya demasiada comida, demasiados juguetes o demasiado tiempo en sus aparatos electrónicos, muchos padres están excediendo a los niños. Dar a los niños más temporalmente alivia a los padres de su culpa, pero los niños son los que finalmente pierden.

7. La tecnología previene las oportunidades de desarrollo muscular mental.

Los niños solían tener que lidiar con emociones incómodas, como el aburrimiento y la frustración. Pero ahora, la mayoría de ellos usan sus dispositivos digitales para escapar de sus sentimientos. Estar pegados a sus pantallas significa que no tienen que calmarse o lidiar en privado con su ansiedad. En cambio, pueden jugar juegos o usar las redes sociales para regular sus sentimientos hacia ellos.

Los padres deben ser más proactivos que nunca para asegurarse de que los niños aprendan las habilidades sociales, emocionales y cognitivas que necesitan para tener éxito.

Construye tus músculos mentales

Los desafíos adicionales del mundo de hoy hacen que sea más importante que nunca que los padres se vuelvan mentalmente fuertes. Eso significa desarrollar hábitos saludables que desarrollen tu músculo mental, a la vez que renuncies a los malos hábitos que pueden detenerte. Volverse mentalmente más fuerte tiene una ventaja adicional: aumenta la probabilidad de que sus hijos sean mentalmente fuertes. Después de todo, aprenden cómo controlar el estrés, resolver problemas y enfrentar los desafíos al observarlo.