Check-in de verano con sus hijos

Dependiendo de a quién le preguntes, es casi el comienzo de la época más o menos maravillosa del año. A medida que nuestros niños comienzan sus vacaciones de verano, es un buen momento para hacer el check-in. Algunas áreas específicas que pueden ser destacadas son el rendimiento académico, las consideraciones sociales y la participación en un estilo de vida saludable, como describiré a continuación.

Rendimiento académico: para muchos niños, las libretas de calificaciones y las conferencias de padres y maestros llegarán pronto y tendremos una mejor idea de cómo están funcionando. Si su hijo ha tenido problemas, el verano es un momento ideal para considerar recursos que les ayuden a obtener ganancias a corto plazo, pero también en preparación para la caída. Puede ser muy útil preparar una lista de preguntas para el maestro de su hijo y específicamente solicitar recomendaciones durante el verano y qué recursos sugieren. Por ejemplo, si es económicamente viable, la tutoría o la escuela de verano podrían ser buenas opciones. Algunas veces se justifica la "prueba" para identificar las fortalezas y debilidades académicas que las escuelas deben abordar. Las "pruebas" se pueden llamar varias cosas, pero generalmente implican pruebas de inteligencia (o pruebas de coeficiente de inteligencia), pruebas de rendimiento (es decir, evaluación de habilidades académicas como lectura y matemática) y quizás medidas psicológicas para ver si puede haber razones emocionales que el niño está luchando en la escuela. Las pruebas pueden ser completadas por el personal de la Junta de Educación o de forma privada por una tarifa. Puede tomar mucho tiempo asegurar una cita de prueba y, por lo tanto, es algo en lo que debe trabajar tan pronto como sea posible si se lo recomienda o si cree que podría ser beneficioso. Las pruebas generalmente van acompañadas de un informe escrito que consiste en recomendaciones individualizadas que podrían implementarse en el próximo año escolar.

Consideraciones sociales: El verano es un buen momento para prestar atención y molestar a su hijo sobre su vida social. Por ejemplo, ¿se sintió inusualmente aliviado de que la escuela terminara? ¿Está esperando las actividades sociales de verano? Estas consideraciones pueden arrojar luz sobre cómo le está yendo a su hijo con sus compañeros. Una preocupación específica es las tasas sorprendentemente altas de intimidación / victimización que sufren los niños; mis colegas encontraron que un gran porcentaje de padres, alrededor del 50%, no saben cuándo está sucediendo (Shemesh et al., 2013). Por lo tanto, quizás sea imprescindible para nosotros preguntar sobre el acoso y tomar medidas si se detecta. La discusión con el personal de la escuela es un primer paso importante para terminarla.

Compromiso con el estilo de vida saludable: estamos en una sociedad donde la obesidad pediátrica y los trastornos de la alimentación están en aumento. El verano puede ser un excelente momento para impulsar el compromiso de un estilo de vida saludable. Por otro lado, también puede ser un momento de preocupación. Nuestros hijos pueden tener visiones de, por un lado, comer helado y papas fritas todo el verano o, por otro lado, perder peso innecesariamente cuando comienza la escuela. Como padres, al menos podemos controlar cuidadosamente la alimentación y la actividad física de nuestro hijo durante el verano. También podemos aumentar la apuesta ayudando a nuestro hijo a encontrar maneras de aumentar la actividad física (por ej., Campamentos, tal vez tomando nuevas actividades tan simples como caminar, trotar o nadar). Durante el año pasado, mi grupo ha estado ayudando a los niños con sobrepeso en el área de la ciudad de Nueva York a encontrar recursos de actividad física de bajo costo o sin costo en sus vecindarios. Hay un sorprendente número de opciones que se pueden encontrar a través de búsquedas en Internet (por ejemplo, http://www.nycgovparks.org/programs/recreation/shape-up-nyc). Si tiene alguna preocupación sobre la conducta desordenada al comer, la consulta con su pediatra puede ayudarlo a decidir si es necesaria una intervención posterior.

Y, por último, su hijo seguramente apreciará la diversión extra que tendrán con usted durante el verano. ¡Asegúrate de "programar" mucha cantidad!

Literatura citada:

Shemesh, E., Annunziato, RA, Ambrose, M., Ravid, N, Mullarkey, C., Rubes, M., Chuang, K., Sicherer, M., y Sicherer, SH (2013). Informes de intimidación de niños y padres en una muestra consecutiva de niños con alergia alimentaria. Pediatría, 131 (1), e10-7.