Cómo pensamos acerca de las enfermedades mentales: tiempo para el Plan B

Es el momento adecuado para una visión más positiva de la esperanza y la recuperación.

Dependiendo de con quién hable, hay puntos de vista dramáticamente diferentes sobre la enfermedad mental. Un escenario que captura la realidad desagradable que muchos han experimentado se ve algo como esto:

Plan A:

Muchas personas con una enfermedad mental:

  • Nunca han sido diagnosticados.
  • Han recibido un diagnóstico pero carecen de conocimiento o lo niegan.
  • Tienen miedo de hablar de ello.
  • Se avergüenzan de revelarlo.
  • Nunca busques tratamiento para ello.
  • Son ridiculizados y rechazados por ello.
  • Quiere tratamiento pero ninguno está disponible.
  • Tener el diagnóstico equivocado.
  • Recibir tratamiento ineficaz.
  • Sentirse desesperado porque no pueden manejarlo.
  • No creas que la recuperación es posible.
  • Están atrapados en la desesperación.
  • Muere prematuramente debido a la falta de atención médica adecuada o por suicidio.

A la inversa, hay una visión muy diferente de la enfermedad mental que presenta una imagen mucho más positiva de la esperanza y la recuperación:

Violka08/CanStockPhoto

Fuente: Violka08 / CanStockPhoto

Plan B:

Muchas personas con una enfermedad mental:

  • Aprende que tienen una enfermedad tratable.
  • Reconoce que lo tienen.
  • Habla abiertamente sobre ello sin miedo ni vergüenza.
  • Quieres aprender más sobre ello.
  • Fácilmente buscar tratamiento para ello.
  • Encontrar ayuda y soporte está disponible para tratarlo.
  • Encuentra profesionales solidarios que quieran ayudarlos.
  • Tener un diagnóstico preciso.
  • Participar en un tratamiento eficaz.
  • Siente la esperanza de poder administrarlo de manera efectiva.
  • Creer que la recuperación es posible.
  • Date cuenta que son una persona y no solo una enfermedad.
  • Reclama sus vidas y experimenta paz mental y plenitud.

La mayoría estaría de acuerdo en que el Plan A ha sido demasiado común en el pasado y que definitivamente es el momento para el Plan B. La pregunta entonces es cómo hacer que el Plan B sea nuestra visión colectiva para el futuro. Se están realizando notables esfuerzos para lograr este objetivo, incluida la adopción del modelo de recuperación, los esfuerzos para ampliar el acceso a los servicios de salud mental, una mayor atención a la prevención del suicidio y el increíble trabajo de defensores de la salud mental en todo el mundo.

Tal vez nos estamos acercando a un punto de inflexión en la forma en que pensamos acerca de la enfermedad mental, donde podemos decir de una vez por todas que el Plan A está en el pasado y que el Plan B está aquí para quedarse.

Copyright David Susman 2018