Desempleados y estresados

Ignorar el estrés que puede estar experimentando no es lo mejor para usted y no necesariamente le conseguirá otro trabajo más rápido. En su libro, Why Zebras Do not Get Ulcers (2004), Robert M. Sapolsky cita una investigación que indica claramente que el estrés tiene un impacto significativamente negativo en el bienestar físico y mental. Sus efectos en nuestro sistema cardiovascular, sistema inmune, memoria y salud mental están ahora bien documentados.

Nuestro sistema nervioso está diseñado para prepararnos para el peligro. Cuando se enfrenta a un evento que pone en peligro la vida, nuestro sistema nervioso desencadena la respuesta de lucha o huida. Se liberan hormonas y se envían mensajes químicos a cada parte de nuestro cuerpo. Como resultado, experimentamos ráfagas cortas de energía que pueden salvar nuestras vidas. Obviamente, la respuesta al estrés respalda nuestra supervivencia como especie, pero resulta ser una espada de doble filo. Desafortunadamente, somos capaces de iniciar la respuesta al estrés no solo ante el peligro físico, sino también ante los temores y las preocupaciones psicológicas. La respuesta al estrés, si se realiza durante períodos prolongados, puede ser devastador. Un estudio de encuesta titulado La angustia del desempleo (2009) realizado por el Centro John J. Heldrich para el Trabajo y el Desarrollo en la Universidad de Rutgers enfatizó el impacto del desempleo en nuestra salud mental. El desempleo de larga duración, tal como nos enfrentamos hoy, está relacionado con la depresión, los trastornos de ansiedad, el abuso de sustancias y la violencia doméstica. Teniendo en cuenta la amenaza que representan los periodos de estrés prolongados para nuestro bienestar, es realmente crítico que participemos en actividades que se ha demostrado que reducen los efectos del estrés en nuestros cuerpos y mentes.

Puede encontrar fácilmente artículos y libros sobre cómo lidiar con el estrés. Dos estrategias que recomiendo son el ejercicio y la respiración diafragmática. Su médico puede darle consejos sobre el tipo y la duración de un programa de ejercicios adecuado para usted. Para la respiración diafragmática, la mayoría de las autoridades sugieren de veinte a treinta minutos de sesión tres o más veces por semana. Personalmente, confío en la respiración diafragmática de cinco a diez minutos por día. Busque en Internet y encontrará varias descripciones y demostraciones. La idea es inhalar lentamente, expandiendo su diafragma (el área justo debajo de su caja torácica). Luego exhala lentamente. Respiro por la nariz y salgo por la boca. Comienzo despejando mi mente y concentrándome únicamente en la sensación producida por el flujo de aire. La experiencia no solo reduce el estrés mental, sino que también deja mi cuerpo físicamente relajado.