¿La baja autoestima te pone ansioso?

Cuatro signos y cómo trabajar en cada uno.

Las personas que acuden a mí debido a su ansiedad se concentran principalmente, de manera comprensible, en los síntomas angustiantes. Pueden sentirse constantemente bombardeados por pensamientos perturbadores y a merced de pensamientos negativos intrusivos. Pueden quedar incómodos, inquietos y tener dificultades para dormir. Aunque estos síntomas son primarios simplemente debido a lo angustiosos e inmediatos que son, a menudo hay algo más profundo que los subyace. Con frecuencia, el problema más profundo no es la ansiedad sino el déficit de autoestima. Una vez que mejore su sentido de sí mismo, aumentará su capacidad para gestionar la vida y sus altibajos.

Aquí hay 4 signos que sugieren que la baja autoestima está en el corazón de su ansiedad y cómo trabajar en cada uno.

1. Quedarte atascado por el rechazo: ¿Te das cuenta de que tu mente explora casos o la posibilidad de rechazo? Este hábito puede hacer que se sienta ansioso y preocupado por ser excluido o rechazado. Es posible que intente obtener la aceptación de las personas que lo devalúan y que le reste importancia a las personas que se preocupan y aman por lo que realmente es. Considera si puedes enfocarte en tu detrimento para obtener lo que no puedes obtener. Como resultado, puede entrar y salir de los patrones de relación, cíclicos y contraproducentes. Esto puede hacer que te sientas ansioso, preocupado e hiper-vigilante acerca de tus fallas percibidas cuando lo que realmente necesitas para enfocarte es aceptarte como eres y aprender a amarte a ti mismo . Rodéate de aquellos que te aman, no de los que tienes que conquistar.

2. No tomar oportunidades: ¿Te resistes a asumir nuevos intereses, esfuerzos de trabajo, amistades? La baja autoestima generalmente significa que teme correr riesgos y hacer actividades novedosas que probablemente aumenten su sentido positivo de sí mismo. Esto significa que se pierde la diversión, la emoción y hasta el logro, pero se mantiene seguro (aunque a menudo se deprime) en su zona de confort. Con el tiempo, la posibilidad de expandir su zona de confort lo pone cada vez más ansioso e incluso con pánico. La ansiedad puede evitar que tomes riesgos y hagas las cosas exactas que te ayudarán a creer en ti mismo. Debe dejar de lado la ansiedad y reconocer que correr esos riesgos es exactamente lo que necesita.

3. Perfeccionismo: ¿hace hincapié en lo que está mal en usted y en su vida y le da un poco de énfasis a lo que va bien? Sentir que siempre hay un problema puede hacer que te sientas ansioso y dejarte con la sensación de que constantemente necesitas “arreglar” las cosas. Una vez que haya resuelto todos sus errores, se produce otro error y entra de nuevo en el modo de reparación. Tu tiempo sería mejor gastado considerando que la naturaleza de la vida es el cambio. La idea de que deberías (o podrías tener) todo tu pato en una fila en todo momento es una ilusión . Trabajar para aceptar esto libera tus reservas. Tome esa nueva energía y concéntrese en asumir esfuerzos que le traigan verdadera felicidad y significado.

4. Enfoque interno: ¿Repites molestias del pasado o reflexionas sobre posibles errores futuros? Revivir internamente lo que hiciste mal o imaginar lo que puedes o no arruinar en el futuro crea ansiedad. En lugar de estar atrapado en tu cabeza, enfócate en el momento presente. Cada vez que note que sus pensamientos recorren esos mismos caminos viejos e insatisfactorios, vuelva al presente. Predecir y repetir la negatividad no evitará que experimente contratiempos, angustias y el juicio o crítica de los demás. Está bien dejar ir y simplemente ser. Cuanto más creas en ti mismo, tus capacidades y tu capacidad para manejar lo que se te presente, menos ansiedad te enfrentarás y mejor te sentirás sobre ti mismo. En mi libro Be Calm: Técnicas probadas para detener la ansiedad Ahora, describo técnicas de vanguardia que pueden ayudar a reducir la ansiedad en el acto.