Lidiando con el Mommy Blues

Hay muchos mitos sobre la maternidad que causan estrés a las mujeres. Se supone que las madres se llenan de alegría en cada momento de la experiencia, se sienten amadas con sus hijos en todo momento y encuentran que el rol es la realización total de sus sueños. En verdad, hay muchos otros sentimientos que son una parte normal de la experiencia, incluida la depresión.

En los primeros meses, las nuevas madres se sienten ansiosas por cuidar a su bebé frágil, están agotadas por la falta de sueño y experimentan sentimientos de pérdida de su identidad personal anterior y de sus relaciones íntimas. Además, a medida que las mujeres se convierten en madres, los recuerdos de la primera infancia salen a la superficie y se sienten intensamente presionados para compensar los errores de sus propias madres y hacer el trabajo a la perfección. En el momento en que creen que se quedan cortos, pueden sentirse deprimidos. Todos estos factores estresantes juntos provocan la experiencia familiar, "depresión posparto". Aunque aman a su pequeño querubín, las madres pueden sentirse enojadas y tristes de que sus vidas hayan cambiado radicalmente.

A medida que los niños crecen, el mismo tipo de problemas continúa para las madres. Las madres se sienten agobiadas por el cuidado constante de sus hijos y la administración de los quehaceres de la vida familiar. Quienes trabajan fuera del hogar están agotados al tratar de equilibrar su trabajo y su vida hogareña. Todas las mamás tienen dificultades para encontrar el tiempo para encajar en el cumplimiento de sus deseos personales y para mantener sus relaciones personales también. Al mismo tiempo, las mamás constantemente lidian con problemas cada vez más complejos entre padres e hijos. Luchando duro para manejar todo bien cuando las cosas se sienten fuera de control, pueden terminar deprimidas.

Aquí hay algunas maneras en que puede lidiar con los factores estresantes de ser madre y levantar su estado de ánimo.

Enfrenta tus sentimientos con aceptación. Es normal que sus emociones fluctúen sobre la crianza de los hijos porque es el trabajo más difícil del mundo. Todas las madres se sienten enojadas con sus hijos a pesar de que sienten un amor intenso por ellos.

Habla de tus sentimientos Comparta sus sentimientos con otras madres y considere unirse a un grupo de apoyo para padres. Un grupo de padres es un excelente lugar para aprender estrategias que lo ayudarán a administrar interacciones complejas entre padres e hijos, obtener apoyo y hacer amigos.

Aprende algunas técnicas de reducción de estrés. Cuando todos te necesitan de inmediato, respirando profundamente o saliendo de la habitación por unos momentos son formas útiles de reducir el estrés y evitar las crisis.

Las estrategias de administración del tiempo también ayudan a las madres a sentirse menos agobiadas. Por ejemplo, preparar almuerzos de sus hijos la noche anterior y poner sus mochilas junto a la puerta antes de acostarse hace que las mañanas sean más suaves.

Mantén un diario. Escribir unas pocas palabras describiendo sus sentimientos cada día puede ayudarlo a sentirse más en control.

Obtenga ayuda. Muchas mujeres creen que para ser una buena madre debes ser capaz de hacerlo todo. Pero el trabajo es muy grande. Comunique sus necesidades a su cónyuge directamente, mientras da un paso atrás para alentar su disposición a participar. Pide ayuda de tus amigos y familiares y, cuando sea posible, contrata a una niñera. Las finanzas pueden ser limitantes, pero algunas mamás hacen arreglos para que un estudiante de secundaria maduro las ayude con las rutinas de la hora de acostarse.

Tómate un tiempo para ti. Durante el día, sentarse un momento para tomar una taza de café y leer el periódico puede renovar su energía. Cuando sea posible, intente tomar una siesta cuando su hijo lo haga.

Busque ayuda profesional. Si descubre que está deprimido con frecuencia, considere hablar con un terapeuta. Muchas madres que nunca han estado en terapia o que eran cuando eran más jóvenes buscan la ayuda de un terapeuta para obtener apoyo, orientación de los padres y una visión de sus vidas.

Haga ejercicio tanto como sea posible. Aunque es difícil caber a tiempo para ir al gimnasio, dar un paseo o usar una cinta de ejercicios, libera esas endorfinas que elevan el estado de ánimo.

Considere el trabajo a tiempo parcial, si es factible. Esto le dará tiempo para estar solo, sentirse productivo y revivir su energía.

Reserve una cita nocturna con su cónyuge cada semana. Pasar tiempo a solas con su cónyuge es esencial para nutrirse a usted mismo y a su relación. Muchas parejas establecen un acuerdo continuo con una niñera y siguen la rutina religiosamente.

A medida que aceptas tus emociones y tomas medidas para trabajar con tu estado de ánimo, encontrarás que la experiencia es menos estresante.