MOMS: ¡3 maneras de hacer un buen hábito!

MOMS: ¡3 maneras de hacer un buen hábito!
Publicado el 28 de diciembre

# 1 – HAGA UNA LISTA

Muchas de nosotras, las madres, no sabemos para qué somos buenos, qué podemos lograr y qué nos proporciona verdadero placer. Nos obsesionamos mucho por lo que no nos gusta de nosotros mismos y no nos definimos por completo por lo que nos gusta. Así que deténganse con lo negativo !! Haga una lista de las cosas en las que es realmente bueno y escríbalas. Escriba lo que es, lo que le gusta y lo que sueña, y cada vez que surjan pensamientos negativos, piense en estas cosas que son positivas.

Luego da un paso más: actúa sobre ellos. Compre un atuendo que muestre la mejor parte de su figura. Programe una actividad que lo haga sentir bien acerca de su vida. Haga una cita con un amigo que sea optimista y a quien le guste quién es usted. Comienza a ser el tipo de amigo que quieres ser y deja de pensar en cómo decepcionas a tus amigos. Grandes cantidades de energía nos dejan a diario porque lo agotamos intentando lo que no se hace, en lugar de abrazar lo que queremos hacer.

# 2 – VIVO PARA IMPRESIONAR A NADIE

Las mujeres que tienen un sentido sano de su propio valor son encantadores porque nunca juegan, se divierten ni intentan impresionar a nadie. No necesitan hacerlo porque tienen la sensación de que les falta muy poco. No es que estén enamorados de ellos mismos; todo lo contrario, son humildes. Están tan cómodos con quiénes son que son libres de elevar a los demás. Las madres que mal pronuncian constantemente a los demás son profundamente inseguras, pero las madres que se sienten seguras hablan con una facilidad y alegría que permite al oyente ver su confianza. Una de las mejores maneras de sentirnos mejor acerca de quiénes somos como madres es presionarnos para aceptar quiénes somos. Hacemos esto al negarnos a fingir con alguien.

# 3 – ESCRIBA LO QUE VA EN LA CAJA

No hay ningún secreto que he llegado a creer que la fe y Dios están íntimamente entrelazados en nuestras vidas como madres. He visto suficiente muerte, para cuestionar la vida futura y la voluntad de Dios y he visto suficientes nacimientos para creer en la bondad de Dios. Es por eso que no puedo discutir nuestro valor como madres sin incluirlo en nuestra conversación. Si somos carne y espíritu, entonces Dios ama a ambos. Al comienzo de nuestras vidas y y al final. Él solo nos acompañará. El que hizo todas las cosas se inclina para acompañarnos a fin de que nunca estemos solos y nunca nos sintamos amados. Ahora que es algo para celebrar al reflexionar sobre nuestro valor.