Soledad: la nueva forma de celebrar

Es el primer día del año nuevo. Te despiertas, la cabeza palpita, el estómago revuelto. Un dedo en el nuevo año y ya lamenta.

Por repulsivo que suene este escenario, está programado en nuestro ADN cultural junto con los sombreros de fiesta y el champán.

Para los introvertidos, la resaca del año nuevo no es el único castigo para una noche de fiesta. La noche de fiesta ya ha servido como castigo. Los introvertidos, que son muy sensibles a la estimulación externa, normalmente disfrutan de actividades de menor intensidad, interacciones con una o dos personas a la vez y amplias dosis de soledad.

¿Cómo sería una fiesta introvertida? Mis seguidores de Facebook respaldan los siguientes suministros: un entorno acogedor o acceso a la naturaleza, un libro o una tableta, una mascota amorosa, diario o cuaderno de dibujo (en estos días los libros para colorear adultos son excelentes recuerdos para la fiesta) y silencioso para la reflexión y la planificación. Esto es indulgencia para el introvertido. Y, contrariamente a las imágenes de la reunión de vacaciones típica, esta experiencia a menudo solitaria se puede compartir. El sicoanalista y teórico infantil DW Winnicott propuso que uno de los mayores logros del desarrollo es aprender a estar solo en presencia de otro. Esta experiencia se fomenta compartiendo placeres tranquilos y compañerismo durante actividades independientes.

Creo que la gran desconexión en nuestra sociedad es la creencia de que disfrutar el tiempo con los demás implica necesariamente hablar y, a menudo, beber, lo que, por supuesto, nos hace hablar más y más. Afortunadamente, otro modelo ha alcanzado la mayoría de edad, uno que involucra cafeterías tranquilas, reuniones de coloración para adultos y fiestas de lectura silenciosa.

Y, aunque pueda blasfemar al gran partido estadounidense, tal vez la víspera de Año Nuevo podría facilitar, en lugar de ahogar, la reflexión. Janus, el dios romano del que se nombra a enero, es un símbolo apto para la introversión. El dios tiene dos caras, una mirando hacia atrás y otra mirando hacia adelante.

"Janus-Vatican" by Fubar Obfusco/Wikimedia Commons
Fuente: "Janus-Vatican" por Fubar Obfusco / Wikimedia Commons

La capacidad inspirada por Janus de hacer inventarios en silencio, curar las reflexiones recogidas y trazar un rumbo para el futuro, proporciona un nuevo modelo para las celebraciones: reflexiones escritas en un diario, conversaciones sobre valores, meditaciones silenciosas mientras se está sentado junto al fuego. Charles Dickens inspiró la reflexión festiva al presentar los fantasmas del pasado, presente y futuro de la Navidad. Después de ese tipo de celebración, lo más probable es que te sientas reabastecido por la mañana. Incluso podría abrir la ventana y gritar un saludo al Año Nuevo.