Su derecho a una opinión no hace que su opinión sea válida

Carol Silver
Fuente: Carol Silver

El mayor engaño que sufren los hombres es sus propias opiniones.
-Leonardo da Vinci

Sin lugar a dudas, la situación política en el mundo durante el último año ha sido una de las más estresantes de los últimos tiempos. Nos ha llevado a todos a escuchar más opiniones de las que podemos contar. O, cuidado a. Opiniones sobre todo, desde los impuestos hasta el aborto. Atención médica a la religión Atención de salud mental a las relaciones raciales. Identidad de género a signos de baño neutros en cuanto al género.

En medio del aluvión de opiniones, escuché un bombardeo del siguiente sentimiento: Esto es lo que pienso, ¡y tengo derecho a mi opinión!

Comentarios como este me dan pausa . Porque es cierto que todos tienen derecho a su propia opinión. También es cierto que, en los Estados Unidos, valoramos la libertad de expresión para que las personas puedan comunicar su opinión sin enjuiciamiento. Valoramos el derecho de creer lo que creemos que es correcto y expresar nuestras opiniones en consecuencia.

Lo que no es cierto es que una opinión es un hecho.

Alarmantemente, la mayoría de los humanos cree que su opinión es un hecho. Creemos incorrectamente que nuestros pensamientos son correctos, ¿verdad? Quiero decir, si lo pensamos, debe ser cierto. Es verdad en nuestra propia cabeza. Siempre tenemos la razón ¡¿¡Derecha!?!

Incorrecto. La verdad es que un hecho es una afirmación que puede respaldarse como verdadera o falsa por datos o evidencia. Por el contrario, una opinión es una expresión personal de los sentimientos o pensamientos de una persona que pueden estar o no basados ​​en datos. De hecho, muchas de nuestras opiniones se basan en las emociones, la historia personal y los valores, todos los cuales pueden carecer por completo de evidencia significativa.

Por ejemplo, puede mantener la opinión de que Trump fue un mejor candidato que Clinton. Del mismo modo que puede tener la opinión de que el verde es mejor que el rojo. Y el queso azul sabe mejor que el cheddar. Que el mundo es plano en vez de redondo. Si su opinión es valiosa depende de cómo llegó a esa conclusión. ¿Tu opinión está basada en datos? O no ?

¿Por qué importa entender la diferencia entre hecho y opinión? Porque aunque todos tienen derecho a una opinión, no todas las opiniones son igualmente valiosas. Esta es precisamente la razón por la cual las opiniones de los "expertos" son más valoradas en los testimonios de los tribunales y en los informes evaluativos porque es más probable que den opiniones basadas en hechos. Basado en conocimiento.

Entonces, la próxima vez que alguien le diga que tiene una opinión fuerte sobre algo, entienda en qué se basa su opinión. ¿Se basa en datos mensurables con algún resultado convincente? ¿O está basado en preferencias e impresiones reactivas y emocionales? Si es el último, tómelo con un grano de sal antes de valorarlo. Y si tiene una opinión fuerte sobre algo de lo que sabe muy poco, intente descubrir por qué antes de dar crédito firme a su creencia.

La verdad desnuda es esta: todos tienen derecho a su opinión. Pero no todas las opiniones son igualmente valiosas. La verdad es que las opiniones basadas en hechos -en datos mensurables y significativos- son más valiosas que aquellas que no lo son.

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