Tu humor = tu fuerza, tu creatividad, + tu inteligencia

A veces nos esforzamos tanto para ser felices de que no podemos pasar un buen rato.

Estos tiempos hacen que sea especialmente necesario estar en contacto con la asurdidad, el ridículo, la diversión y la ironía de lo cotidiano.

Tener sentido del humor en tiempos difíciles es como tener sentido del humor sobre el sexo o la muerte: el humor le permite tener una perspectiva de una perspectiva potencialmente abrumadora.

El humor te permite elevarte y explorar en lugar de denigrar u ocultar tus sentimientos.

El humor no descarta un tema, sino que generalmente lo abre a discusión, especialmente cuando el tema no se considera "adecuado" para la discusión pública.

El humor puede ser un atajo, una revelación -el tipo de cosas para las que la gente solía consumir alcohol– para llegar a la verdad del asunto. El mejor humor permite la opinión y la refutación. No deberíamos pensar que ciertos tipos de humor deben ser prohibidos, pero tenemos que ser sensibles a cómo se usa.

Deberíamos ver el humor como una forma de poner nuestros sentimientos y respuestas a disposición de los demás sin aterrorizar a nuestros oyentes. Cuando podemos enmarcar un asunto difícil con humor, a menudo podemos comunicarnos con alguien que, de otro modo, se retiraría.

El humor es a la vez una muestra de fortaleza y vulnerabilidad: estás dispuesto a dar el primer paso, pero confías en la respuesta de tu oyente. Hacer un comentario generosamente divertido, señalar lo absurdo de una situación, convertir la vergüenza o la inquietud en algo para compartir en lugar de reprimir es arriesgado, pero a menudo es exactamente lo que se necesita.

El humor es una forma de afirmarnos, de levantarnos para enfrentar un desafío, canalizar el miedo hacia el placer, traducir el dolor en coraje.

"En caso de duda", aconseja Cynthia Heimel, "haz el ridículo". Existe una delgada línea microscópica entre ser brillantemente creativo y actuar como el idiota más gigantesco de la tierra. Entonces, qué diablos, salto ".

Cuando realmente podemos reírnos, nos hemos declarado los ganadores, sin importar cuál sea la situación, porque nuestra risa es una indicación de nuestra perspectiva y control.

Perderse de risa es una prueba de que tiene la confianza suficiente como para arriesgarse a un momento de alegre abandono. Ir-salto; seguir-risa.