Las cinco cosas que todo estudiante de primer año de la universidad necesita escuchar

Los años universitarios a menudo se idealizan como una gran escena social, algunas clases interesantes y preparación para una carrera. Pero esta imagen desmiente la realidad de que la universidad y la transición a la adultez que la acompaña a menudo es un camino difícil. Hay desafíos personales, sociales y académicos que incluso los estudiantes más "preparados para la universidad" enfrentarán, porque este período de la vida se trata de cambios.

Para muchos estudiantes, estos cambios incluyen alejarse de la familia (emocionalmente y con frecuencia geográficamente), desarrollar una identidad adulta, cuestionar las creencias con las que se criaron y elegir una carrera profesional. Ninguno de estos son tareas fáciles, y las alarmantes estadísticas de depresión, abuso de sustancias y mala conducta en los campus son señales de que los estudiantes están luchando con estos cambios.

En nuestro trabajo con los estudiantes en transición a la universidad, hemos encontrado que estos cinco mensajes son cruciales para el éxito personal, social y académico en el campus. Si bien es importante que los estudiantes los escuchen antes de que lleguen a sus dormitorios, es probable que también necesiten continuar escuchándolos mientras avanzan en sus años universitarios.

  1. Encuentre un mentor adulto: convertirse en adulto requiere navegar una amplia gama de desafíos, desde elegir una especialización y una carrera, hasta decidir cómo establecer relaciones saludables con sustancias, compañeros y sexo. Si bien las universidades ofrecen amplias oportunidades para enfrentar esos desafíos de frente, es raro encontrar mentores significativos en el campus. Los profesores no están capacitados para desempeñar esta función, y los RA todavía están lidiando con estos problemas. Debido a que los estudiantes necesitan hablar sobre temas delicados sin temor a decepcionar a su mentor, los padres no están bien posicionados para desempeñar este papel en la vida de sus hijos. La tutoría de adultos de calidad a menudo se encuentra al contactar activamente a un maestro, entrenador o mentor de los años de la escuela secundaria. Los estudiantes deben tomar la iniciativa aquí, en lugar de esperar a que alguien se comunique con ellos. Los padres pueden reconocer los límites de su capacidad para ser mentores y ayudar a sus hijos a pensar a quién contactar antes de que haya una crisis. Este tipo de relaciones de mentoría son relativamente raras, pero son cruciales para garantizar que los estudiantes reciban el apoyo que necesitan.
  2. La universidad es lo que usted hace de ella: si bien es fácil definir la universidad como un conjunto de cursos necesarios para obtener un título, esta definición pasa por alto el panorama general. Los estudiantes tienen que dar su significado de aprendizaje. Los campus universitarios son montañas de oportunidades de aprendizaje curriculares, cocurriculares y extracurriculares. En el campus, los estudiantes están rodeados por los expertos mundiales en todo, y tienen instalaciones para perseguir virtualmente cualquier pasión. Y, la comunidad en general ofrece pasantías, trabajos y oportunidades de voluntariado. Las universidades ofrecen flexibilidad en los horarios y la planificación para juntar todas estas piezas de manera que tengan sentido para cada alumno. El truco de todo es que cada estudiante tiene que abrirse camino en esta montaña de oportunidades. Ser intencional sobre ese proceso es difícil, lo que hace que el apoyo de los mentores sea aún más valioso.
  3. Todo el mundo está cambiando: ningún estudiante universitario lo tiene todo resuelto. La mayoría de los estudiantes en el campus estarán en la misma etapa de la vida, lidiando con los mismos desafíos. Muchos pasarán por varias fases mientras prueban nuevas identidades e intereses. Esto a menudo resulta en amistades y relaciones que van y vienen a medida que cambian las pasiones y los intereses. Los estudiantes se benefician al reflexionar sobre los cambios que ocurren dentro de ellos y de los demás. Puede ser devastador ver desaparecer una relación cercana. Sin embargo, ser conscientes del hecho de que ellos y todos a su alrededor están pasando por cambios constantes puede ayudar a los estudiantes a evitar culparse a sí mismos por amistades o relaciones que no evolucionan con los cambios que trae la vida.
  4. Sé valiente cuando formes tu identidad adulta: convertirte en el adulto que quieres ser requiere mucho trabajo, especialmente si aún no estás seguro de quién quieres ser. Afortunadamente, las universidades ofrecen muchas oportunidades para tomar riesgos saludables y probar nuevas identidades. Los estudiantes se benefician al escuchar que tienen flexibilidad y libertad para explorar temas de estudio, clubes, actividades fuera del campus y grupos sociales sin tener que comprometerse con ellos a largo plazo. Este mensaje es particularmente importante hoy en día, ya que los estudiantes de secundaria y preparatoria han aprendido a comprometerse profundamente con sus actividades curriculares y extracurriculares para impresionar a las universidades. Los estudiantes necesitan ayuda para diferenciar entre riesgos audaces y saludables y aquellos que son fugaces y peligrosos.
  5. Apóyate en tus pasiones: una suposición común entre los estudiantes es que si no sabes dónde quieres estar en 30 años, posiblemente no puedas tomar buenas decisiones sobre lo que deberías estar haciendo ahora. Esto puede ser paralizante para aquellos que no tienen una visión a largo plazo. También puede ser doloroso para aquellos que tienen una visión, pero descubren que los pasos para llegar allí no se alinean con sus pasiones o valores. Se debe alentar a los estudiantes a apoyarse en sus pasiones mediante la identificación de lo que más les gusta hacer y la forma de involucrarse con ese trabajo de manera significativa sobre una base diaria. Al hacer lo que aman en espacios que les permiten aprender más sobre él y perfeccionar sus habilidades, los estudiantes pueden convertirse en expertos en sus pasiones. La experiencia apasionada es el camino más directo hacia una carrera satisfactoria.

Compartir estas perspectivas a medida que los estudiantes llegan al primer año y luego regresar a ellos a lo largo de sus años universitarios es una forma poderosa de ayudar a los estudiantes a tomar el control de su experiencia universitaria.