¿Cuáles son tus regalos?

Siempre me ha fascinado el Renacimiento, uno de los períodos más creativos de la historia de la humanidad. Una sensación de nuevas posibilidades llenó el aire como Miguel Ángel, Leonardo da Vinci, Galileo, Santa Teresa de Ávila, William Shakespeare, la reina Isabel I, John Milton y muchos otros fueron inspirados por un sentido de la vocación.

Los teólogos del Renacimiento enseñaron que Dios les dio a todos los hombres y mujeres un conjunto de dones (o talentos) únicos, llamándolos a vivir con un sentido de vocación, para hacer su propia contribución personal al mundo. En lo que ahora conocemos como la "profecía autocumplida", nuestras expectativas configuran de manera dramática nuestra experiencia. Debido a que generaciones de hombres y mujeres del Renacimiento esperaban descubrir sus vocaciones, de manera notable los encontraron. Convertirse en artistas, académicos, científicos, santos y líderes en muchos campos, trajeron alegría y significado a sus vidas, haciendo contribuciones creativas sin precedentes a la ciencia, la religión, la política y las artes.

El Renacimiento tiene valiosas lecciones para nosotros hoy. Nosotros también podemos brindar mayor alegría y sentido a nuestras vidas al descubrir nuestros dones, nuestros talentos y fortalezas personales, y encontrar formas de usarlos. La investigación en psicología positiva ha demostrado que todos tienen un conjunto de cinco "fortalezas distintivas" y que su uso regular nos hace más felices, más saludables y más exitosos (Seligman, Steen, Park y Peterson, 2005).

En el Renacimiento, Miguel Ángel, Milton, Santa Teresa de Ávila, Galileo y sus contemporáneos comenzaron a descubrir sus dones en la infancia, siguiendo su curiosidad, aprendiendo en qué eran buenos, en lo que amaban hacer. De niño, Miguel Ángel molestó a su padre dibujando en lugar de seguir sus estudios. El joven John Milton escribió poesía y soñó con escribir una gran epopeya. A la pequeña Teresa le encantaba leer las vidas de los santos y establecer una ermita en un huerto cercano. A los trece años, Galileo vio un cometa brillar en el cielo, despertando su curiosidad de por vida sobre el cosmos.

¿Qué amabas hacer cuando eras niño? Dibujar, pintar, contar historias, tocar un instrumento musical, explorar las maravillas de la naturaleza Puede encontrar una mayor energía e inspiración volviendo a conectar con sus dones: inscribirse en una clase de arte o de escritura, recoger ese instrumento musical o dedicar tiempo a la jardinería o el senderismo. También puede descubrir sus puntos fuertes de firma al tomar la encuesta en línea de VIA-IS en www.authentichappiness.org.

Nuestro mundo de hoy se parece mucho al Renacimiento, lleno de desafíos y cambios inquietantes. Sin embargo, como en el Renacimiento, nuestros mayores recursos naturales están dentro de nosotros. Al conectarnos con nuestros dones y descubrir nuestro propio sentido de llamada, podemos traer mayor alegría y significado a nuestras vidas y crear nuevas posibilidades para nuestro mundo.

¿Cuáles son sus regalos y cómo puede comenzar a usarlos hoy?

Referencias

Dreher, DE (2008). Su renacimiento personal: 12 pasos para encontrar la verdadera vocación de su vida. Nueva York, NY: Da Capo.

Seligman, MEP, Steen, TA, Park, N y Peterson, C. (2005). Progreso de la psicología positiva: validación empírica de las intervenciones. American Psychologist, 60 , 410-421.