Ir a una entrevista?

Las entrevistas para un trabajo o la aceptación en un programa educativo (como medicina, derecho o escuela de postgrado) pueden ser una experiencia desalentadora y que despierta ansiedad. Aunque es posible que haya enviado documentos de respaldo (por ejemplo, hoja de vida o curriculum vitae, cartas de recomendación / referencia, declaración personal, etc.), la entrevista personal puede tener un gran peso en si consigue el trabajo o si es aceptado en el programa.

Uno de los procesos más importantes que ocurre cuando los extraños se encuentran es la impresión que tienen el uno del otro. Las personas que no lo conocen pueden formarse opiniones y creencias sobre usted en su primera reunión. Es solo la naturaleza humana hacer eso. Hay muchas variables que entran en esa primera impresión (por ejemplo, su apariencia, su actitud, sus modales, su atención, incluso el tipo de automóvil que maneja). Esas ideas sobre ti pueden realmente capturar quién eres o pueden ser inexactas, o el observador puede ser un pobre juez de carácter. El punto es que la formación de impresión continúa todo el tiempo y deberías estar atento si quieres este trabajo o programa. ¿Por qué intencionalmente haría algo que podría poner en peligro sus posibilidades? Con esto en mente, presentamos cierta información que se encuentra relacionada con los resultados exitosos de la entrevista. Claramente, no hay garantía; pero, prestar atención a estos factores probablemente sea más útil que no hacerlo.

Un tema sobre el que se escribe más es: cómo prepararse para una entrevista. Algunas sugerencias incluyen

  • Investigando a fondo la compañía o la escuela a la que está solicitando
  • Estar preparado para responder preguntas sobre sus calificaciones, fortalezas, debilidades, encajar en la compañía o programa, y ​​metas profesionales
  • Desarrollar una serie de preguntas para el entrevistador (es) para que pueda evaluar mejor a la organización y cómo puede contribuir a ella, así como también cómo puede contribuir a sus aspiraciones.
  • Participar en entrevistas de práctica antes de la entrevista
  • Prestar atención a su apariencia física al vestirse apropiadamente, asearse y descansar
  • Ser profesional en su manera, postura, habla e interacciones antes, durante y después de la entrevista

Aunque estas sugerencias ayudarán a preparar al solicitante para la entrevista y pueden desempeñar un papel en si el individuo es contratado o aceptado, las características de la personalidad también son importantes. Los psicólogos que estudian la personalidad han categorizado los rasgos de personalidad en cinco factores amplios, que se conocen como los "Cinco Grandes". Estos son "abiertos a la experiencia", "escrupulosidad", "extraversión", "amabilidad" y "neuroticismo" (o " estabilidad emocional").

La investigación sobre los "Cinco Grandes" ha encontrado que la escrupulosidad, la estabilidad emocional y la extraversión son las categorías de personalidad que son las más evaluadas en todas las entrevistas. Al considerar características importantes para una amplia variedad de trabajos, la conciencia y la conformidad se consideran atributos positivos. Sin embargo, este no es el caso para cada trabajo ni es el más valorado por cada entrevistador. Por ejemplo, algunas ocupaciones, como las relacionadas con ventas, pueden valorar la extraversión; mientras que la apertura a la experiencia puede ser deseable para puestos que implican investigación o ciencia.

Otro elemento importante derivado de la entrevista que puede usarse para formarse una opinión sobre el solicitante son las señales no verbales.

  • El contacto visual es un comportamiento que siempre se acentúa porque ayuda a establecer la relación, transmite el interés de uno y da la apariencia de confiabilidad. Una persona que mantiene contacto visual parece más concienzuda que una que no lo hace.
  • Una persona que sonríe puede ser considerada sociable y extravertida.
  • Tener una voz que suena dominante da la impresión de que el individuo puede ser un líder eficaz.
  • Las señales visuales pueden influir en la opinión del entrevistador sobre la diligencia y la apertura de la experiencia del solicitante.
  • Las pistas vocales pueden llevar a impresiones de extraversión y conciencia.

Aunque los problemas mencionados anteriormente son importantes en cómo pueden influir en la opinión del entrevistador, otro factor crítico es la autoeficacia del solicitante. Es decir, el grado de confianza que tiene el solicitante para que pueda rendir bien durante la entrevista.

  • Por ejemplo, si el solicitante se siente asustado, inseguro o derrotado antes de ingresar al edificio, el solicitante viene a la entrevista con la expectativa de que no tendrá un resultado exitoso y, en consecuencia, la motivación del solicitante se ve negativamente afectada.

La baja autoconfianza puede ser perjudicial. Por lo tanto, es importante desarrollar la propia autoestima. Esto se puede lograr mediante

  • solicitando empleos o programas donde el solicitante tiene las calificaciones y aptitudes necesarias
  • tener numerosas entrevistas de práctica con retroalimentación constructiva y coaching
  • y si es necesario, intervenciones cognitivo conductuales para evaluar y tratar mejor los problemas que afectan la autoeficacia de uno mismo

En resumen, hay una serie de factores que influyen en los resultados de la entrevista. Aunque nadie puede realmente anticipar y conocer a todos y cada uno de ellos, podemos tomar medidas para estar mejor preparados y comprender su importancia. También podemos aprender de las experiencias de otros y también las nuestras. De hecho, la vida está llena de "entrevistas", no solo para trabajos o programas educativos, sino para cada encuentro importante. Nunca está de más dar lo mejor de sí.