Grande, duro y perdido: ya es hora
Mi hija cumplió 18 años recientemente, lo que ocasionó toda clase de reflexiones, pero principalmente me pareció un buen momento para pensar, bueno, el tiempo. Un tema complicado, eso; como cualquiera que alguna vez haya intentado cumplir con una fecha límite, soportar una reunión de comité, o comprender verdaderamente la teoría de la relatividad le […]