5 maneras de saber cuándo dejar la relación

Aquí hay cinco formas de saber cuándo es el momento de empacar, encontrar su propio lugar, cambiar su número, liberarse de enredos financieros y prácticos y asegurarse de que sus amigos estén listos para ofrecerle soporte:

1. Ya no quieres ir a casa. No espera ver o estar en la compañía real de la persona con la que está íntimamente involucrado. Prefieres la idea de la relación con la realidad de ella; usted tiene una imagen idealizada del amado que está lo suficientemente alejada de la persona auténtica y cotidiana que el estar en su presencia socava, erosiona y diluye sus sentimientos de afecto y respeto.

2. Practicas conductas autodestructivas: beber, fumar, consumir drogas, autovergüenza, comer en exceso, comer de forma deficiente, patrones de sueño deficientes, arrebatos emocionales irregulares o cualquier otra forma de autosabotaje ritual en compañía de tu pareja. más de lo que haces cuando estás solo.

3. Has llegado a asociar tu relación íntima más con miedo, depresión, dolor, anhelo, inquietud, perturbación, turbulencia, escasez, nerviosismo, conductas extremas y pérdida que con la relajación, alegría, satisfacción, diversión, facilidad, creatividad, aceptación, generosidad y placer

4. Establece una serie de objetivos inmediatos a corto plazo en lugar de hacer planes a largo plazo bien estructurados. Crees que todo mejorará "Tan pronto como obtenga un mejor trabajo" o "Cuando el bebé se haya quedado sin pañales" o "Cuando pierda veinte libras". La vida es una serie de momentos; cada momento viene con sus propios desafíos. No hay un solo punto en el que "todo mejore". Solo existe el futuro, que se despliega día a día, y que debe afrontarse con plenitud y coraje.

5. Sabes que es hora de irse cuando, a pesar de recibir ayuda tanto juntos como por separado, permaneces más profundamente solo dentro de la relación de lo que estarías fuera de ella. El viejo shibboleth nos dice que un individuo puede estar menos solo cuando está solo que cuando está infelizmente atado a la persona equivocada y es cierto. Su pareja puede convertirse en su ancla, pero tal vez no sea de una manera que lo mantenga estable; quizás, en cambio, sea de una manera que lo arrastre a las profundidades. Liberarse puede significar salvar su propia vida.