Abuso psicológico de personas mayores, Parte II

1. La persona mayor no puede hablar por sí misma y por sí misma, sin la presencia de un pariente o un cuidador. Siempre están con el senior, hablan por ellos o enfatizan que el senior inventa cosas, a menudo olvida y confunde las cosas. Además, pueden estresar los problemas y los rasgos negativos del adulto mayor.

2. El cuidador muestra repetidamente su enojo hacia el adulto mayor en su presencia y sin ambages expresa sus sentimientos negativos hacia ellos. Pueden exagerar las malas acciones, las ventajas o incluso los problemas de salud de la persona de la tercera edad (como afirmar públicamente que la persona mayor se había mojado, a pesar de lo desconsiderado que es e irrelevante para los oyentes).

www.pixabay.com
Fuente: www.pixabay.com

3. Al senior se le niega privacidad; el cuidador revisa su correo y lo lee, organiza (y compra o arroja) sus pertenencias, no respeta su privacidad incluso en momentos de higiene personal o cambio de ropa, incluso si no es necesario desde el punto de vista de los mayores. salud.

4. El cuidador tiene el poder de decisión sobre quién puede visitar al adulto mayor y cuándo y cómo pasan su tiempo, aunque no sea médicamente necesario.

5. El adulto mayor teme hablar sobre ciertos temas y reiteradamente enfatiza que si le hablan a alguien, el cuidador estaría enojado.

www.pixabay.com
Fuente: www.pixabay.com

Qué podemos hacer para ayudar?
El primer y elemental paso es la seguridad de que confiamos en la persona, estamos aquí para ayudarlos e intentaremos ayudarlos. A menos que sea necesario, no tome más pasos sin su conocimiento y consentimiento. Intente informarles acerca de los posibles medios de ayuda y otras formas de llevar una vida; por ejemplo, cómo les resultaría vivir en otro lugar, tener a alguien más para cuidarlos o cómo y dónde podrían encontrar dicha atención. También podemos informarles sobre las opciones de su protección, por ejemplo, acompañarlos a la policía y respaldar su testimonio con cualquier información relevante que tenga. También las personas comprensivas de su círculo de cuidadores o parientes pueden contactar a un psicólogo o un trabajador social en el establecimiento respectivo, o incluso llamar de manera anónima a una línea de ayuda y consultar sus sentimientos, experiencias y opciones. El abuso psicológico puede ser difícil de detectar por muchas razones, pero si lo reconocemos en alguna parte, nunca deberíamos silenciarnos.

Nota: Esta es una traducción abreviada del artículo checo del autor en la revista Sociální služby ("Servicio social", www.socialnisluzby.eu).