Estas temporadas de vacaciones

Destacar lo que tenemos y lo que necesitamos.

El otro día, mi hijo me preguntó qué es lo que más me gusta de las vacaciones. Supongo que lo que me gusta es que me obliga a disminuir la velocidad y simplemente a ver lo que sucede a mi alrededor. No espero que el teléfono suene, ni que se llene mi casilla de correo electrónico, ni que ninguna factura exija atención inmediata. Todo lo que se espera de mí es que atiendo a mi familia. De alguna manera, hacer las tareas, cocinar, limpiar y otras tareas parece menos mundano, y más significativo cuando las hago en esta época. Siento que estas actividades son un acto de amor que puedo hacer por aquellos que amo.

Estoy agradecido por mi familia, incluso cuando me ponen nervioso. Estoy agradecido por mi casa y mi vida, incluso si a menudo pone obstáculos en el camino que he decidido es el que deseo seguir. Mañana es el 26 de diciembre y mi vida volverá a ser “normal”. Mi objetivo es recordar que la vida es una bendición y que, para resumir el Dalai Lama, la felicidad es el resultado de estos actos de compasión que inspiran las fiestas. que yo disfrute

Una nota interesante sobre la compasión: según un estudio reciente en la revista Personalidad y diferencias individuales , la práctica de la atención plena, que implica vivir el momento y centrarse en el pensamiento y las sensaciones sin juzgar, es un conducto para aumentar el bienestar psicológico.

¿Cómo exactamente? Me gustaría centrarme en dos vías específicas. Primero, la práctica de la atención plena nos proporciona información sobre lo que es importante, la calidad de nuestras vidas y, en consecuencia, “nos ayuda a tomar decisiones conducentes a una felicidad duradera, no solo a los placeres efímeros”. En segundo lugar, la atención plena nos abre a otras personas y nos ayuda a para crear sentimientos de compasión, especialmente para otros que están sufriendo.

En mi trabajo como consejero, sé muy bien que las vacaciones no son tan alegres para todos. Para algunas personas, las vacaciones les recuerdan que no están tan felices como les gustaría estar. Recuerdan a miembros de la familia o amigos que han fallecido, o se centran en problemas que los afectan física y emocionalmente. La buena noticia es que la atención plena también puede ayudarlo a tener compasión por sí mismo. Me gustaría que este año se centre en el cuidado personal y luego lo expanda en la dirección de los demás. Este es tu camino hacia tu propio bienestar. Te lo deseo en ti.

¡Felices vacaciones!

Referencias

Hollis-Walker, L., y Colosimo, K. (2011). Conciencia plena, autocompasión y felicidad en los no meditadores: un examen teórico y empírico. Personalidad y diferencias individuales, 50 (2), 222-227.