Tratar con narcisistas no es una tarea fácil. Son arrogantes, autorizados, explotadores, egocéntricos y enérgicos. Pero, al mismo tiempo, también son encantadores, persuasivos y atractivos, lo que dificulta navegar por sus traicioneras redes.
¿Cómo se ponen los narcisistas de esta manera?
Al tratar de explicar el desarrollo del rasgo, el pensamiento actual tiende a enfatizar los roles que juegan el ambiente y la experiencia. Estos incluyen la crianza indulgente o negligente, una cultura individualista, el crecimiento exponencial de las redes sociales y la exposición de los medios a las celebridades que se comportan mal. Si bien estos factores externos tienen una gran influencia en el desarrollo del narcisismo, pasan por alto otra biología contribuyente crucial.
En un artículo reciente, los psicólogos Nicholas Holtzman y M. Brent Donnellan proponen tres nuevas explicaciones para el desarrollo del narcisismo, que se basan en la biología y el medio ambiente:
1. Es una cosa física.
Mientras que la búsqueda de un "gen de narcisismo" aún no ha tenido éxito, los autores argumentan que es un rasgo con una base física. Sostienen que un individuo puede volverse narcisista por su apariencia, o los atributos físicos reales que poseen. Este concepto se conoce como herencia reactiva, que sostiene que la apariencia física de una persona da forma a su personalidad. Por ejemplo, las personas más grandes pueden ser más agresivas hacia el exterior que aquellas que son más pequeñas porque es más efectivo para ellas. En el caso del narcisismo, Holzman y Donnellan señalan que este rasgo está asociado con ciertas características físicas. De hecho, los estudios muestran que el narcisismo está relacionado con el atractivo, la fuerza y el movimiento suave, tal vez como reflejo de la destreza atlética. Los investigadores observan que, anecdóticamente, el narcisismo se ha relacionado con rasgos faciales más agudos en las mujeres, y una cabeza más grande, labios más delgados, una mandíbula robusta y cejas más gruesas en los hombres.
2. Es una cosa que nutre la naturaleza.
El narcisismo también puede ser el resultado de las interacciones complejas entre los genes y el medio ambiente. Se piensa que las personas varían en su composición genética y tienen un mayor o menor potencial para convertirse en narcisistas. Sin embargo, y esto es clave, los factores ambientales pueden influir en la expresión de tendencias narcisistas. Desde esta perspectiva, las personas que están genéticamente predispuestas al narcisismo lo desarrollarán si, por ejemplo, se crían en un entorno en el que sus cuidadores carecen de sensibilidad, como ser inapropiadamente exigentes o que no responden. Las personas que naturalmente se inclinan hacia la confianza o la exuberancia se volverán narcisistas si sus padres no están en sintonía con sus necesidades.
3. Es una cosa evolutiva.
El narcisismo puede ser el resultado de la selección evolutiva porque ofrece supervivencia y ventajas reproductivas. Holzman y Donnellan proponen tres explicaciones sobre por qué:
Vinita Mehta, Ph.D. es un psicólogo clínico con licencia en Washington, DC, y un experto en relaciones, manejo de la ansiedad y el estrés, y desarrollo de la salud y la capacidad de recuperación. Ella ofrece charlas para su organización y psicoterapia para adultos. Ella ha trabajado exitosamente con personas que luchan contra la depresión, la ansiedad y las transiciones de la vida, con una creciente especialización en la recuperación de trauma y abuso. También es autora del próximo libro, Paleo Love: Cómo nuestros cuerpos de piedra complican las relaciones modernas .
Referencia
Holtzman, NS & Donnellan, MB (2015). Las raíces de Narciso: modelos antiguos y nuevos de la evolución del narcisismo. En V. Zeigler-Hill, LLM Welling, y TK Shackelford (Eds.), Perspectivas Evolutivas en Psicología Social (pp. 479-489). Nueva York: Springer