El viaje del héroe

 

Mike Wilson/stocksnap
Fuente: Mike Wilson / stocksnap

Los últimos blogs se han centrado en el conflicto, cómo y por qué el cerebro hace que el conflicto sea inevitable. Luego observamos dos estrategias para resolver las molestias: hacer buenas preguntas y asumir la responsabilidad de buscar soluciones. Ahora vemos una estrategia más relacionada con las inevitables diferencias que surgen entre dos personas: Servicio. Definimos el servicio como hacer lo correcto para ayudar a otro sin esperar nada a cambio. Esta es una forma muy desafiante y difícil de atravesar el mundo. Significa buscar cómo ayudar a los demás incluso cuando te están dificultando la vida. Este es el viaje del héroe.

Si miras películas icónicas como Star Wars y El señor de los anillos , los temas son consistentes. Una persona común es llamada a un propósito superior y se eleva a la ocasión, a pesar de las dudas y frustraciones, y finalmente hace lo que debe hacerse. El héroe antiguo es historias y películas japonesas es el samurai. El samurai es la palabra japonesa para "servir". Servir es cumplir con nuestro potencial más elevado, dar, ayudar a alguien que puede no merecer nuestra bondad o incluso ser consciente de ello. Los ejemplos son tan triviales como dejar entrar a alguien en su carril en el tráfico, o dejar su material de lectura sin prestar atención absoluta al asistente de vuelo, y tan profundo como ser un buen padre, haciendo sacrificios que el niño nunca apreciará. Muchos otros han hablado del valor del servicio al espíritu humano.

No puedes vivir un día perfecto sin hacer
algo para alguien que no puede pagar
tú.
John Wooden

La pregunta más persistente y urgente de la vida
es: ¿Qué estás haciendo por los demás?

Martin Luther King

Que nadie venga a ti sin
saliendo mejor y más feliz.

Madre Teresa

¿Por qué servir a los demás es tan satisfactorio? ¿Por qué donamos dinero para ayudar a otros que no conocemos y nunca lo haremos? ¿Por qué ofrecemos tiempo voluntario para Hábitat para la Humanidad, Rotary, Kiwanis y un sinnúmero de otras organizaciones? ¿Por qué ayudamos a amigos, familiares y extraños? La respuesta es en parte biológica. Con nuestros nuevos escáneres cerebrales, ahora sabemos que hay dos centros de placer en el cerebro. Uno es el centro de placer, el núcleo acccumbens, que se ilumina cuando disfrutamos de una buena comida, alcohol o sexo. Y el segundo centro de placer, el surco temporal posterior superior se ilumina cuando estamos en servicio.

Pero sabes que estar de servicio no es fácil. La gente aprovechará la bondad o la ignorará. Puede dar a personas que abusarán de su compasión y generosidad. Puede amar a una pareja romántica o a un niño, y la relación puede volverse amarga de todos modos. Entonces, ¿cómo podemos permanecer en el servicio a pesar de las traiciones y desilusiones? Ser cínico, cauteloso y defensivo es fácil. Permanecer en un estado mental amoroso es difícil, a veces muy difícil. En el blog del próximo mes, veremos estrategias para vivir una vida de servicio.