¿Las personas mayores son más sabias?

A medida que las decenas de millones de baby boomers entran en su tercer acto de vida, el concepto de sabiduría está ganando adeptos culturales. Al igual que las generaciones anteriores, el camino de los boomers para ser reconocidos como los ancianos sabios de la sociedad tiene sus raíces en la ciencia. La asociación entre la sabiduría y el envejecimiento tiene una base en la biología: a medida que los humanos envejecen, la mente se desarrolla aún más, un subproducto directo de simplemente vivir más tiempo y experimentar más cosas. Las personas mayores suelen ser más competentes que los jóvenes en ciertas dimensiones de la cognición, en particular las que implican diferentes formas de resolver problemas, así como la planificación de la vida y la realización de objetivos futuros. Se considera que los que se consideran "sabios" tienen una mayor empatía, son más correctos en sus opiniones sobre el estado emocional de los demás y se preocupan más por el bienestar de otras personas. Por lo tanto, la sabiduría parece incorporar un tipo de "inteligencia emocional" centrada en las relaciones, explicando por qué es tan venerada. ¿Debería sorprender que las personas mayores sirvan como fuente de sabiduría para los jóvenes, especialmente cuando se trata de relaciones y tomar decisiones de vida?
La acumulación de sabiduría parece ser la forma de compensación de la naturaleza por la insistencia del cuerpo en envejecer. La memoria empeora a medida que envejecemos, pero la investigación también sugiere que nuestra estrategia para la forma en que procesamos los pensamientos y la información cambia para mejor. Los mayores tomadores de decisiones toman decisiones significativamente mejores al usar su corteza prefrontal, donde se controla el pensamiento deliberativo y más racional. Los escáneres cerebrales revelan que los adultos más jóvenes suelen emplear solo un hemisferio para resolver un problema en particular, mientras que las personas mayores suelen tener ambas partes de sus noggins simultáneamente, un proceso denominado "bilateralización". Aprovechar todo el poder del cerebro nos permite para hacer conexiones más significativas a un problema o situación. A medida que los individuos se enfrentan a situaciones diferentes, en otras palabras, sus cerebros forman representaciones o contornos cognitivos que les permiten detectar y reaccionar adecuadamente cuando surgen situaciones similares. Este fluir natural y sin esfuerzo del conjunto de experiencias que hemos reunido a través de los años es, a falta de una palabra mejor, sabiduría, un activo inestimable que hace que envejecer la experiencia rica y maravillosa que puede ser.