Donald Trump, Corrección política, Ignorancia y comedia

Mi opinión sobre las preocupaciones de Donald Trump sobre "corrección política" cuando las presentó en el debate del 6 de agosto en el GOP:

1. PC significa "perfectamente civilizado", que es lo que cualquier líder estadounidense debe ser. La corrección política es como SpellCheck para tu boca.

2. La "corrección política" se ha convertido en uno de esos términos como "cambio de imagen total", "ídolo estadounidense" o "mascota profesional": ha ingresado a nuestro vocabulario sin prestarle demasiada atención. Cuando escucho "pc" sigo pensando "computadora personal", pero probablemente deberíamos sustituir "perfectamente civilizado". Cuando las personas hablan en PC, hablan como personas civilizadas.

3. ¿Se debe castigar a la gente por hablar de una manera que los haga sonar viciosos, ignorantes, desagradables, de mente estrecha y atormentadores? Piensa en los comentarios de Trump sobre cómo las mujeres se ven mejor de rodillas. ¿Debería alguien señalarle que su disgusto por las mujeres, como algo más que animales de servicio, es evidente cuando hace tales comentarios? Sí, creo que alguien debería. Estoy a favor de señalar los términos que los seres humanos civilizados no usan en la mesa de adultos. Nadie debe sonar como un idiota ignorante y estrecho sin ser absolutamente claro en su (o) su intención de hacerlo. Trump quiere decir que suena como lo hace, y quiere que todos los demás se hagan eco de él; es por eso que el nombre de Trump debe borrarse de la pizarra política.

4. Algunos podrían preguntar: "¿Dónde se detiene la Primera Enmienda y comienza la corrección política? ¿No tenemos derecho a la libertad de expresión?

5. Mi respuesta es esta: Sí, tenemos derecho a la libertad de expresión. También tenemos derecho a usar camisetas que digan "Soy un pedófilo" y "Mi Pitbull atacará a tu estudiante de honor" y, sin embargo, no es algo que recomendarían los amigos o asociados más confiables. No si querías ser popular. O mantente vivo. Y sí: es cierto que podemos sonar como un imbécil si lo elegimos: podemos sonar como personajes sacados de una farsa o hablar en blasfemos de vitriolo desde un podio y la Primera Enmienda lo garantiza. ESTA es la razón por la cual la comedia estadounidense continúa floreciendo y resplandeciendo incluso cuando el sistema político se vuelve cada vez más desvencijado y aterrador.