“Si el entorno del patio de recreo es uno en el que ocurren conductas intimidatorias y antisociales, se hace difícil afirmar que este entorno contribuye inherentemente a la salud social, emocional y cognitiva“. – Autores de la investigación
Cuando se le preguntó: “¿Cuál es tu asignatura favorita?”, No es sorprendente que los niños sonrían y digan “Recreo”, ya que suelen correr y estar afuera, a menudo sin supervisión. Pero, ¿estamos realmente utilizando el recreo a su máximo potencial de crecimiento? Investigadores recientes dirían que no, que hay espacio para crecer. Fueron a más de 500 escuelas primarias que cubren 22 localidades urbanas y buscaron no solo observar sino desarrollar una herramienta para maximizar el aprendizaje en el patio de recreo.
El poder del patio de recreo
BMC Public Health publicó los hallazgos, que aclararon las oportunidades que nos faltan al simplemente dejar que los niños se vuelvan locos durante el recreo. Identificaron áreas específicas, que nosotros (como profesores, profesionales, administradores escolares) podemos hacer algunos ajustes y producir no solo crecimiento físico, sino también ganancias mentales, emocionales y sociales. Sugirieron que el recreo también pueda enseñar:
Recreo: ¿Hace el grado?
La investigación de hoy revela que el recreo, aunque es un momento para el ejercicio físico, también es un momento privilegiado para ayudar a los niños a cooperar, resolver conflictos de manera amistosa y aprender habilidades de salud emocional y social. Por supuesto, hay más factores para una experiencia de recreo positiva, como el nivel de compromiso de los adultos y la calidad del equipo de juego (por seguridad y variedad), pero hoy más que nunca los niños necesitan entrenamiento emocional dentro y fuera del aula en la escuela. Pregúntele a cualquier padre cuyo hijo haya sido intimidado y con frecuencia sucedió en el patio de recreo poco vigilado. Entonces, transformar el patio de recreo en algo más positivo es lo que las escuelas centradas en el bienestar están haciendo, y así elevar una nueva generación de niños emocionalmente más sanos, un juego de kickball a la vez.
Referencias
Estudie en BMC Public Health por William V. Massey, Megan B. Stellino, Sean P. Mullen, Jennette Claassen y Megan Wilkison (2018). Enlace: https://bmcpublichealth.biomedcentral.com/articles/10.1186/s12889-018-5295-y#Declarations
Materiales ubicados en https://www.greatrecessframework.org/