Cómo la tristeza puede costarle dinero

Si la tristeza no nos deja sintiéndonos lo suficientemente mal, ahora sabemos que también puede costarnos dinero.

La investigación de científicos psicológicos en la Escuela de Gobierno Harvard Kennedy y la Universidad de Columbia indica que nos impacientamos y tomamos malas decisiones financieras cuando nos sentimos tristes, y eso puede conducir a pérdidas a largo plazo.

En un estudio, los participantes que vieron un video que induce tristeza también tienden a ser más impacientes y más propensos a hacer cosas en el momento para sentirse mejor, a pesar de que esas elecciones tuvieron consecuencias financieras graves a largo plazo.

Los investigadores llaman a esto "tendencia actual" en el informe publicado en la revista Psychological Science.

Pasamos al "sesgo actual" cuando queremos gratificación inmediata; en el caso de la tristeza queremos sentirnos mejor, por lo que nos impacientamos e ignoramos los mayores beneficios que se obtienen cuando nos tranquilizamos y esperamos un momento.

Esto no es sorprendente. Nos hemos convertido en expertos en adormecer las emociones difíciles que aparecen en nuestras vidas al llenar los momentos con cosas que proporcionan gratificación instantánea. Compramos, bebemos, navegamos por Internet o comemos en lugar de prestar atención al por qué nos sentimos mal desde el comienzo. También probamos otros hábitos sin sentido, todos diseñados para movernos instantáneamente de la incomodidad del momento a un estado de mejor sensación.

Sin embargo, estos comportamientos solo nos preparan para el dolor futuro. Porque cuando entorpecemos nuestro dolor en el momento, la fuente de ese dolor nunca desaparece realmente. En cambio, sigue pedaleando una y otra vez. A menudo, también, las cosas que hacemos para aliviar el dolor en el momento, como comer, todo el pan de brownies, nos dejan sintiéndonos mal con nosotros mismos y luego tenemos esas emociones negativas para resolverlas.

Todo esto puede perjudicar nuestra salud física, dañar nuestras relaciones, cerrar nuestro espíritu, y ahora, parece, nos costó mucho dinero.

¿Qué pasa si simplemente decidimos darnos cuenta? ¿Realmente nos sentamos con las emociones que encontramos? Las emociones negativas tienen mucho que enseñarnos. Brindan pistas e información sobre las áreas de nuestras vidas en las que quizás estemos un poco fuera de sincronía. Nos muestran dónde no estamos operando en alineación con nuestros valores, sin ocuparnos de nuestras propias necesidades. Son un sistema de alerta que nos avisa cuando estamos fuera de la ruta y fuera de balance.

Si prestamos atención a esos sentimientos y nos inquietamos por ellos, podemos recoger información que nos ayude a orientarnos hacia las cosas que sí nos inspiran. Las cosas que alimentan nuestra mente, cuerpo y espíritu. Cuando eso sucede, ya no sentimos la necesidad de disfrutar de otros comportamientos que agotan la energía para salir del dolor, como el gasto excesivo o el exceso de comida. En cambio, reconocemos lo que la tristeza tiene para enseñarnos. Permitimos que nos ayude, que nos guíe hacia una dirección saludable de mejor sentimiento para que podamos avanzar a través de ella en lugar de quedar atrapados en la emoción difícil y el mal comportamiento.

Aquí hay cinco formas de hacerlo:

1. Toma conciencia. Cuando sienta ardor en la ira o se sienta agotado por la tristeza, callarse y observar cómo aparecen esas emociones en su cuerpo antes de comenzar a dejar a la gente en la carretera o de comer todo en la nevera. Podemos experimentar nuestras emociones; no tenemos que portarnos mal con ellos.

2. Ponte curioso y busca el regalo . Haga una pausa lo suficiente para ver qué provocó esos grandes sentimientos. ¿De dónde están viniendo? ¿Qué tienen que enseñarte? Si constantemente se siente deprimido y triste después del trabajo, no baje el paquete de seis, comience a ver por qué el trabajo está teniendo un costo tan emocional. Cuando sabes de dónde vienen los sentimientos puedes difundir su poder.

3. Toma una acción inspirada . Ahora, puedes ver la fuente de la emoción y tal vez incluso el don de la visión que ofrece, tomar alguna acción inspirada para moverte a través de ella y entrar en un espacio con mejor sensación. Si su trabajo lo está agotando, pase 10 minutos al día, antes o después del trabajo, haciendo algo que le apasione, algo que lo inspire. A menudo, cuando construimos a tiempo para hacer lo que llena nuestro corazón de alegría, nos sentimos mejor en las otras áreas de nuestra vida.

Si reconoce que está comiendo para compensar demasiado una relación poco apasionada, siéntese y hable con su pareja, llame a un terapeuta o tome alguna otra medida inspirada para controlar la situación en lugar de anestesiarse con ella.

4. Busca ayuda. Cuando estás en medio de la desesperación, el dolor, la ansiedad, alcanzas a los demás. Hable con un terapeuta, llame a un amigo, vaya a un grupo de apoyo y solicite ayuda. Todos tenemos momentos en los que necesitamos el apoyo de los demás y la conexión social es una forma poderosa de avanzar a través de nuestras emociones difíciles.

5. Da gracias. Incluso durante los momentos difíciles, es importante y útil detenerse lo suficiente para estar agradecido. Encuentre una cosa, una cosita, la respiración en su cuerpo, el perro a sus pies, el café caliente por la mañana, y agradezca por ello. Entonces siente la gratitud en tu cuerpo. Cuando somos capaces de cambiar nuestro enfoque de lo que no funciona a lo que es, las emociones difíciles se transforman en algo que se siente mejor.

La tristeza no tiene por qué costarle. En su lugar, puede ofrecer información valiosa que lo conectará con lo que es importante y lo pondrá en el camino de la vida que desea.