No te preocupes Sea feliz.

iStock/Used with Permission

"Date cuenta de que ahora, en este momento del tiempo, estás creando. Estás creando tu próximo momento en función de lo que estás sintiendo y pensando. Eso es lo real. Podemos dejar ir la creencia inconsciente de que estar ansiosos por el pasado o el futuro de alguna manera nos protegerá y en cambio reprogramar nuestras células con nuevas formas de respuesta ". – Doc Childre

¿Te preocupas por tu hijo? Únete al club. Es parte de la descripción del trabajo. Pero cuando decimos "¡ Ten cuidado! "Para nuestro hijo, no estamos dando el mensaje de que nos importa, aunque eso es lo que sentimos. Estamos dando el mensaje de que el mundo es un lugar inseguro y no confiamos en nuestro hijo para navegarlo.

Podrías decir, en cambio:

"¡Que te diviertas!"

"¡Guau, te veo subir tan alto!"

"Verifique con su cuerpo … ¿Es esa altura cómoda?"

Por supuesto, es posible que desee detectar a su pequeño diablo. Pero una rodilla raspada no sería el fin del mundo, y podría ser solo la experiencia de aprendizaje que necesita.

La investigación muestra que la preocupación nos hace temer más a los malos resultados. Las decisiones que tomamos desde ese lugar temeroso no son las mismas decisiones que tomaríamos desde un lugar de amor y confianza. Adivina qué decisiones tienen mejores resultados?

Los sabios han estado predicando que nuestros pensamientos crean nuestras vidas desde que comenzó la enseñanza. Lo que sea que atendemos florece. Entonces, cuando nos enfocamos en algo, es como mirar al microscopio: hacemos que lo que nos estamos enfocando sea más grande, en nuestras percepciones y, por lo tanto, en la realidad.

¿Crees que preocuparte mantiene seguro a tu hijo? Lo sé. Nuestras mentes están fuertemente invertidas en preocuparse. Creemos que es un seguro, pero es solo una bola y una cadena. Muchos estudios han llegado a la conclusión de que las personas que se preocupan más no obtienen una idea o no resuelven los problemas mejor. ¡Simplemente se hacen más infelices!

Esto se debe a que, aunque preocuparnos es la forma en que nuestra mente trata de protegernos, en realidad estamos programando negativamente nuestro subconsciente. El subconsciente piensa en imágenes y cree lo que le decimos. Muchos científicos ahora están de acuerdo en que todos esos pensamientos de ansiedad que recorren nuestras mentes en realidad le están dando a nuestro subconsciente el mensaje para crear esos escenarios. Por lo menos, esos pensamientos preocupados estimulan sentimientos de ansiedad y estrés que nos impiden sentirnos tranquilos como padres.

¿Quieres romper el hábito de la preocupación y reprogramar tu subconsciente para la felicidad?

Aquí está su proceso de cinco pasos.

1. Comience a notar cada vez que su mente se preocupe. Cada vez que te observas preocupándote por algo, detente. Respirar. Sacude tus manos para dejar ir ese miedo. Solo notar su estado físico y relajarse conscientemente le envía un mensaje a su mente de que no hay emergencia.

2. Tranquilícese.

"Todos los niños se quitan los pañales tarde o temprano".

"No tengo que ser perfecto. Mis hijos estarán bien, aunque cometo errores ".

"Estoy haciendo lo mejor que puedo". Dos pasos hacia adelante, un paso atrás todavía me lleva a donde quiero ir ".

"Estoy muy agradecido de que mi hijo esté seguro y saludable".

"Está actuando como un niño porque es un niño".

3. Reprograme su subconsciente. Cuando diga su nueva declaración, muestre a su subconsciente una imagen del resultado deseado, ya sea que su hijo esté sonriendo y sea seguro o que esté felizmente limpiando el inodoro. No se preocupe por cómo lograr su objetivo; eso hará que su mente vuelva a involucrarse, lo que hace surgir el miedo. En cambio, convoque un sentimiento de gratitud feliz junto con su imagen. Cuanto más tiempo puedas tener esa sensación e imagen, más rápidamente tu subconsciente comenzará a ayudarte a crearla.

4. Actúa. Pregúntese: " ¿Qué puedo hacer ahora (o hoy) para hacer más probable este resultado positivo?". Entonces hágalo. Aquí es donde esta técnica difiere del pensamiento positivo. Tenemos que sentirnos bien de saber qué acción tomar. Pero tenemos que tomar la acción para cambiar nuestras vidas.

5. Cada vez que surja su preocupación, repita estos pasos. Los científicos han descubierto que nuestras mentes tienden a seguir ciertas pistas repetidamente, como surcos en un viejo disco de vinilo. Cada vez que interrumpe una preocupación y envía a su subconsciente una imagen de un resultado más feliz, está creando un nuevo camino para su mente: un camino de felicidad en lugar de ansiedad. Pronto, te encontrarás en un paisaje completamente nuevo.