¿Sabes cuántas porciones realmente bebes?

Cuando las personas pasan un buen rato en la ciudad con amigos, enfrentemos la realidad; muchos no mantienen una cuenta exacta de cuánto beben, tal vez una estimación aproximada. Es un hecho bien conocido que el alcohol afecta nuestra capacidad para tomar decisiones acertadas o que no habría tan altas estadísticas sobre muertes por accidentes relacionados con el alcohol.

Los estudios muestran que las personas tienden a informar menos de su consumo en hasta un 66 por ciento, en comparación con la cantidad de alcohol que se compra. Los datos se obtuvieron de encuestas durante un período de tres años de 45,000 personas. No hubo diferencias en los hábitos de las mujeres y los hombres, pero los jóvenes menores de 24 años tenían más probabilidades de informar su consumo de alcohol. Un estudio también encontró que aquellos que informaron que bebían una vez al mes en realidad bebían dos veces al mes.

El Centro de Investigación de Adicciones de la Universidad de Victoria dijo que eso es un problema porque las encuestas sobre el consumo de alcohol son cruciales para estimar la enfermedad y las lesiones causadas por la droga recreativa favorita de las personas.

La mayoría de la gente sabe que beber puede causar futuros problemas de salud a largo plazo y puede conducir al alcoholismo, pero a menudo piensa que puede controlarse incluso cuando no lo hace. Esta es la historia inicial de muchos adictos y, de hecho, es una forma de negación, que debe abordarse. Un litro de cerveza no es igual a un 12 oz. lata de cerveza, por ejemplo, pero algunas personas afirmarán que es solo una "cerveza". La mayoría de las personas no tienen idea de cuántas porciones se cuentan en una botella de vino, lata de cerveza o una botella de bebidas espirituosas. Puede ser difícil admitir la verdad a veces.

A diferencia de otros países, como el Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda, las etiquetas de botellas de alcohol en Canadá y Estados Unidos no incluyen el número de bebidas estándar, lo que dificulta la medición de la cantidad de bebidas alcohólicas que se consumen. .

Educar a los consumidores sobre el tamaño de las porciones de bebidas alcohólicas es un excelente primer paso. Las personas pueden tomar mejores decisiones con información más precisa y quizás evitar que comience a consumir alcohol en forma más responsable.