Destacando el PSAT

Los padres quieren que sus hijos tengan éxito y sean felices. Por esta razón, puede ser difícil para los jóvenes y sus padres cuando los resultados de las pruebas son menores de lo anticipado. Aprender a superar la desilusión, sin embargo; puede demostrar ser un catalizador hacia el éxito. Entonces, ¿cómo crea un padre este tipo de motivación e inspiración cuando los resultados de las pruebas parecen indicar una falla?

Ayudar a un niño a superar la decepción comienza temprano en la vida. Una pareja de investigadores, Bettner y Lew, intentan inculcar lo que llaman "las C cruciales". Estas C cruciales consisten en hacer que un niño se sienta capaz, conectado, como si contaran, e infundiendo valor a pesar de la situación. Los padres que aman y aceptan a sus hijos por sus fortalezas y debilidades crean niños que tienen estas C cruciales, se sienten apoyados y pueden, por lo tanto, aceptar y superar el fracaso.

Los padres pueden ayudar de formas específicas de la siguiente manera:

Los padres deben señalar áreas de fortaleza en lugar de centrarse solo en las debilidades. Estas áreas de fortaleza pueden estar en la prueba o en otras áreas. Por ejemplo, un niño que falló en una parte de la evaluación puede ser fuerte en otra área o puede sobresalir en un área que no ha sido evaluada, como el atletismo.

Señale historias de éxito pasadas. También puede ser útil recordarles a los niños cuándo tuvieron éxito después de lo que inicialmente parecía ser un fracaso. Las formas en que los jóvenes superaron sus propios fracasos pasados ​​pueden ser claves para el éxito futuro.

Los padres pueden compartir sus propios fallos que conducen a éxitos posteriores. Los padres pueden ser excelentes modelos a seguir para perseverar y superar decepciones.

Los padres deben replantear su propio pensamiento sobre puntajes de exámenes. Los padres que se dan cuenta de que los mayores desafíos de la vida pueden convertirse en las mejores historias de éxito del mañana son más propensos a replantear los puntajes bajos en las pruebas de una manera positiva. Los fracasos de un niño pueden enseñarle a superar, estudiar más y perseverar.

Sobre todo, recuerde que un niño merece consideración positiva a pesar de lo que indican los puntajes de las pruebas. Ama y respeta a tu hijo por ser el gran ser humano en lugar de pensar en un número en un puntaje de PSAT.