Tiempo de pantalla, no siempre es algo malo

Por qué los niños con dislexia se sienten mejor.

Por Emma Lindeblad, Ph.D.

El tiempo de pantalla ha tenido un mal golpe. Pero la tecnología puede ayudar a los jóvenes. Los niños con discapacidades de lectura se están beneficiando. Su autoconfianza y autopercepción pueden mejorar a través de la tecnología. Las aplicaciones para teléfonos inteligentes y para iPad realmente pueden ayudar a los niños a leer, lo que mejora el bienestar.

Investigaciones previas han demostrado que las dificultades de lectura han llevado a los niños a desarrollar baja autoestima y confianza, así como poca motivación en la escuela. Los investigadores han supuesto que esto se debe a una sensación continua de fracaso; los niños con dislexia, por ejemplo, sienten fracaso cuando practican la lectura sin ningún progreso. Los adultos con dislexia han informado que esta falta de autoestima les ha seguido hasta la edad adulta. (McNaulty, 2003)

Ciertas aplicaciones ayudan a motivar a los niños con dislexia y todos, incluidas las familias, obtienen los beneficios.

Múltiples estudios de mi trabajo con niños que sufren de dislexia muestran que su autoestima no es inferior a la de sus pares (Lindeblad 2015, 2017). Cuando estos niños recibieron aplicaciones de lectura para teléfonos inteligentes, se sintieron más motivados sobre la escuela y tuvieron una mayor auto-agencia. Los padres reportaron un clima más positivo en el hogar con menos quejas sobre la tarea (Lindeblad, 2016).

¿Qué aplicaciones están realmente funcionando?

Las escuelas en Suecia están aumentando su uso de aplicaciones para facilitar y mejorar el aprendizaje. Para el grupo de niños con dislexia, las aplicaciones se encuentran en la categoría de Tecnología de Asistencia (AT). La aplicación, por ejemplo, puede fotografiar texto y leerlo en voz alta al alumno. En lugar de luchar con la lectura en sí misma, el alumno puede concentrarse en la comprensión de los hechos. El estudiante también puede dictar texto en una aplicación, texto a voz, lo que puede ayudar al proceso de escritura enormemente. Se cree que las funciones de estas aplicaciones tienen un efecto positivo a largo plazo en el bienestar y las habilidades de aprendizaje de estos niños. Las aplicaciones permiten eludir el problema de la lectura, lo que a su vez permite que los niños con dificultades de lectura consuman información de manera simple y fluida. Esto literalmente elimina el problema de la ecuación.

Además de esta ventaja, nuestra investigación muestra que los niños que sufren de dislexia que utilizan AT a través de aplicaciones, su desarrollo de lectura continuó progresando a la misma velocidad, incluso si no practicaban activamente, sino que simplemente compensaban su lectura con las aplicaciones.

La tecnología está sacando a los niños de la rutina emocional causada por las dificultades de la lectura.

Deshacerse de la actividad emocional de la lectura fortalece el estado mental de los niños y su aprendizaje al mismo tiempo. Además, la revolución tecnológica, el aumento del conocimiento en el campo de la dislexia, así como una mayor empatía han contribuido a estos resultados.

Emma Lindeblad, Ph.D., es profesora del Departamento de Psicología de la Facultad de Salud y Ciencias de la Vida de la Universidad de Linnaeus en Suecia.