JAMA, el diario de la Asociación Médica Americana, publicó recientemente el primer estudio longitudinal de cohorte que investiga si el uso de nuevas tecnologías por parte de adolescentes lleva, con el tiempo, a un aumento de los síntomas del TDAH. El estudio encontró que los adolescentes que informaron no participar en el uso de los medios de comunicación con una frecuencia alta tenían una tasa más baja de desarrollar síntomas de TDAH (4,6 por ciento) que los adolescentes que habían participado en al menos siete actividades (9,5 por ciento). En otras palabras, el riesgo de desarrollar síntomas de TDAH se duplicó con el uso de pantallas. (Los niños que ya tenían altos niveles de síntomas de TDAH en la inscripción fueron excluidos del estudio).
Pero quizás el hallazgo más interesante es que no todas las actividades de pantalla tuvieron efectos iguales. Por ejemplo: jugar videojuegos con la familia no tuvo una asociación significativa con el desarrollo de los síntomas del TDAH, mientras que jugar videojuegos solo (incluso si jugar con otras personas en línea) tuvo una fuerte asociación con los síntomas posteriores del TDAH.
Una de las varias razones por las que este estudio es tan importante es que fue un estudio de cohorte longitudinal, en el que los investigadores siguieron al mismo grupo de niños a lo largo del tiempo. Esa es una herramienta mucho más poderosa que un estudio transversal, en el que los investigadores solo les preguntan a los niños en un momento dado qué están haciendo y luego hacen correlaciones con otras características de esos niños. En un estudio transversal, es difícil decir qué sucedió primero: ¿los síntomas del TDAH son lo primero y causan que los niños vean más las pantallas, o algunos niños ya lo estaban viendo más y luego desarrollan TDAH? Un estudio de cohorte longitudinal permite a los investigadores hacer mejores inferencias sobre la causa y el efecto, porque al menos se puede determinar, como hicieron estos investigadores, qué fue primero, el huevo o la gallina. O en este caso, el tiempo de pantalla o los síntomas de TDAH.
Conclusión: este estudio es una evidencia adicional de que el uso excesivo de algunas tecnologías nuevas puede aumentar los síntomas del TDAH. En cuyo caso, los padres debemos saber: ¿Qué es el “uso excesivo”? ¿Y qué tecnologías representan el mayor riesgo?
Combinando este estudio con las recomendaciones actuales de la Academia Americana de Pediatría con respecto al tiempo de pantalla, las siguientes conclusiones tienen sentido:
Fuente: CCO / Creative Commons