Mamá caliente en la casa?

¿Quién realmente quiere ser una madre caliente? La combinación de sentir a menudo poco apreciado, mantenerse al día con los horarios agitados de sus hijos y lidiar con niños que pueden ser muy difíciles es suficiente para que cualquier madre pierda la calma. De seguro, en este contexto, lo último que quieres que te vean es una "mamá caliente".

Durante más de veinte años en mi práctica he trabajado con mamás que han estado más allá de lo caliente … se habían sobrecalentado tanto emocionalmente que se habían quemado emocionalmente.

Para bajar tu temperatura emocional y mantenerte fresco, lo siguiente puede ser útil:

  • No te tomes a tus hijos demasiado en serio cuando te desafían. Recuerde que los niños y adolescentes están poniendo a prueba los límites, no solo en su casa, sino en los hogares de todo el país.
  • Tenga en cuenta que la mejor disciplina para sus hijos es tener la autodisciplina para mantener la calma, especialmente si lo provocan de manera consciente o inconsciente.
  • Crear y mantener un diario de gratitud. Cuanto más activamente reflexione sobre las alegrías de la vida familiar y los momentos positivos que comparte con sus hijos, los más ricos emocionalmente y menos amenazados se sentirán cuando sus hijos lo pongan a prueba.
  • Haga ejercicio, coma bien y duerma lo suficiente en la mejor medida que pueda. Mientras más cuides de tu ser físico, mejor te sentirás en general.
  • Busque el apoyo de otras mamás, miembros de la familia con empatía u obtenga ayuda profesional si aún se siente abrumado. Como madre de gran valor, su salud emocional necesita mantenerse en su lista de prioridades.

Los consejos anteriores están destinados a ayudarlo a no estar más caliente como madre, sino más tranquilo y atractivo como persona. Recuerda usar estas estrategias y te mantendrás fresco y nunca dejes que te vean sudar.