Autocompasión para perder peso: 4 ideas para ayudar a construirlo

"Sé amable contigo mismo: es mejor para tu dieta", nos dijo un artículo de 2011, resumiendo el nuevo trabajo sobre la autocompasión y la pérdida de peso. La idea de que darte palizas después de comer en exceso no ayuda ha llamado la atención. Resulta que ser más amable contigo mismo, sin importar cuán "bueno" o "malo" sea tu consumo, funciona mejor.

Estas ideas se han difundido a través de Twitter, revistas femeninas y otros canales. Sin embargo, muchos que comen en exceso todavía temen que una mayor autocompasión genere menos autocontrol. Además, los hábitos de la mente, como pensar en términos de "buena" y "mala" alimentación en primer lugar, son difíciles de desalojar, incluso cuando usted acepta que han sobrevivido a su utilidad. También están reforzados por los medios que promueven la idea de que puedes cambiar tus hábitos alimenticios en un día o perder 30 libras en un mes.

Ser más amable consigo mismo conduce más seguramente al cambio de hábito por varias razones. El cambio de hábito es más fácil cuando estás más relajado. La motivación y el entusiasmo útiles crecen cuando te sientes digno y merecedor, no cuando estás desanimado. Además, el cambio, paradójicamente, ocurre más fácilmente desde un lugar de autoaceptación, ya que ciertos tipos de resistencia se calman. (Esta última idea ha guiado durante mucho tiempo la psicología budista, y sigue siendo útil en todo tipo de entornos).

Así que tal vez puedas ver el sentido de todo esto, pero aún sigues enganchándote para recriminarte después de un brownie extra o esas papas fritas que no necesitaste. ¡Y ahora tal vez te estés castigando a ti mismo porque ni siquiera puedes hacer que esto de la autocompasión sea correcto! Deténgase y recuérdese a sí mismo que este hábito, al igual que los hábitos alimenticios, tomará tiempo para crecer y fortalecerse. Aquí hay cuatro ideas clave para construir la postura de ser más amable con usted mismo.

1.) Progreso, no perfección. Esta idea, largamente promovida por grupos de 12 pasos, lo dice todo. No vas a romper comportamientos, hábitos de pensamiento o reacciones emocionales de la noche a la mañana. Recuerde que incluso darse cuenta de lo que está haciendo, o tratar de pensar de manera diferente, es un cambio en la dirección correcta, incluso si el patrón completo no se ha movido demasiado. Cuando te encuentres siendo duro, recuerda que es un proceso, no un evento todo a la vez.

2.) Mira tus palabras. Aquí, de nuevo, hay piezas del patrón que no cambiarán todas a la vez. Estas piezas comprenden todas las palabras y frases que mantienen la autocrítica en su lugar. Intenta ponerte a ti mismo usando términos como "engañé" o "soy un cerdo", cualquier término negativo que no usarías con un amigo o con un niño al que intentabas apoyar para hacer cambios. Intenta no decir estas palabras en voz alta. Fíjate cuando los piensas. Con el tiempo trate de reemplazarlos con términos más comprensivos, como los que le diría a ese amigo o niño: "tal vez esa no fue una gran elección … pero esto es algo difícil … Lo resolveré … lo haré". sigue adelante …"

3.) ¿Qué sucedió? Dése permiso para ver cada lapso (episodio en el que hace lo que quiere dejar de hacer) como un lugar para examinar "lo que sucedió". ¿Qué pensamientos, emociones o situaciones o estados físicos lo hicieron vulnerable a hacer algo impulsivo o autosabotar? ¿Qué pudo haber ayudado a prevenirlo? ¿Qué puede hacer para ayudar a protegerse o reforzarse en el futuro? Acércate a este examen con tanta neutralidad como puedas, nuevamente, como lo harías con un amigo o un niño.

4.) Small Choices Add Up. Recuerde, y recuerde a menudo, que cada elección que haga en la nueva dirección ayuda a su cuerpo y cerebro a asimilar un nuevo hábito. No necesariamente tiene que cambiar todo para que ocurra un cambio positivo.