Intentando encontrar un sentido de seguridad mientras se divorcia

No hay seguridad en esta tierra, solo hay oportunidad. ~ General Douglas MacArthur

La seguridad real no existe. En un día cualquiera, todo lo que cualquiera de nosotros tiene es una sensación de seguridad. Nos rodeamos de todo lo que nos es familiar y tomamos medidas y pensamientos que nos hacen sentir más en control de nuestro entorno. Construimos estructuras que creemos que nunca se desplomarán, establecemos ciertos puestos de trabajo con tenencia, y tenemos la institución del matrimonio que se supone que durará para siempre. Pero la vida tiene una forma de mantenernos humildes, y vemos que algunas de las cosas que creíamos que serían para siempre no siempre son para siempre.

Pensar que tenemos seguridad no es un defecto de diseño en nuestra especie. De hecho, es todo lo contrario. Si ninguno de nosotros se sintiera seguro, no podríamos correr riesgos ni aventurarnos en territorio desconocido. Tener una sensación de seguridad nos ayuda a crecer y cambiar.

Cuando la vida nos lanza una pelota curva, es nuestra sensación de seguridad la que se rompe, no nuestra seguridad real (ya que eso no existe).

Es normal sentirse decepcionado (o incluso traicionado) cuando algo que pensamos que podríamos o con lo que debemos contar no dura o no es confiable. Pero incluso con las mejores intenciones, nadie puede prometer nada para siempre; todo lo "permanente" se puede cambiar, y cualquier seguridad que tengamos es simplemente una sensación de seguridad. Sin duda, podemos tomar medidas para disminuir las posibilidades de que nuestra seguridad se vea amenazada, pero nada de lo que hacemos es infalible.

Comprender esto puede cambiar su perspectiva sobre lo que está experimentando. También puede facilitar su aceptación de su situación de divorcio, lo cual, a su vez, facilitará su movimiento a través del proceso de duelo.

No es malo querer sentirse seguro, pero no es realista creer que eres inmune a los eventos que sacudirán tu base. La seguridad absoluta no existe para nadie, en ningún lado. Con esto en mente, disfrute de los momentos en que se siente seguro sabiendo que es una ilusión cómoda y necesaria.

Afirmación

Disfruto mi sentido de seguridad sabiendo que la seguridad real es una ilusión.

Ejercicio diario

  • Escriba todas las experiencias que haya tenido en su vida que pensó que eran seguras pero no lo fueron. ¿Cómo recuperó su sensación de seguridad?
  • ¿Cómo cambiará su visión de la vida sabiendo que la seguridad no es más que una ilusión? ¿Harás diferentes elecciones? ¿Apreciarás lo que tienes más?

Este artículo fue extraído de Stronger Day by Day: Reflexiones para la curación y la reconstrucción después del divorcio, por Susan Pease Gadoua