Sentido del momento en que estamos

El presente es un momento de creciente incertidumbre: una China en ascenso, una inteligencia máquina en aumento, una creciente desigualdad y tensiones sociales, un extremismo creciente, poderes en aumento para manipular el ADN y los fenómenos cuánticos. Pero da un paso atrás, respira hondo y date cuenta: hemos estado aquí antes. Esta es nuestra Era del Descubrimiento. Como el último, es un momento de genio y riesgo florecientes. Y afortunadamente para todos nosotros, gran parte de la sabiduría obtenida de los últimos permanece para ayudarnos a navegar por lo nuevo.

Bodleian Libraries
Fuente: Bibliotecas Bodleian

"La perspectiva es la guía y la puerta de entrada, y sin ella nada se puede hacer bien". Cuando escribió estas palabras, Leonardo da Vinci (1452-1519) estaba aconsejando a los artistas, pero fácilmente podría haber estado aconsejando a toda su generación. Cuanto mayor sea nuestra incertidumbre, más urgentemente necesitamos dar un paso atrás y tomar una imagen completa para darle sentido a todo, de modo que cuando lleguen los impactos -y los golpes vienen con frecuencia cada vez mayor- tengamos un apalancamiento mucho mejor. sobre su significado … y nuestra respuesta.

Ser capaces de establecer una amplia perspectiva sobre nuestro momento presente nos permite enfrentar la agitación que nos rodea y prosperar en medio de ella. Al ver nuestro mundo hoy a través de una lente renacentista, rápidamente se enfocan las prioridades urgentes para nuestras vidas personales y para nuestras comunidades.

Aquí hay tres:

1. Encuentra tu Florencia.

Durante el siglo XV y principios del XVI, Florencia fue uno de los centros creativos más alfabetizados de todo el mundo occidental. El lugar dio a luz a Donatello, Brunelleschi, Leonardo da Vinci, Miguel Ángel, Maquiavelo y otros innovadores, y durante todo el Renacimiento se jactó más maestros artísticos per cápita que en cualquier otro lugar de Europa.

Hoy en día, es tentador pensar que ese lugar importa mucho menos de lo que solía hacerlo. Los insumos vitales -materiales, capital, personas e ideas- ahora circulan globalmente. De hecho, lo opuesto es verdad. Las entradas creativas no fluyen de manera uniforme en todas partes. Póngalos en movimiento global, y se agrupan muy rápidamente en aquellos lugares que ofrecen ventajas a lo largo de las dimensiones de diferencia restantes: geografía, clima, infraestructura, política gubernamental o el "zumbido" difícil de definir generado por las multitudes y la complejidad de una Gran ciudad.

Busque el lugar físico donde personas de todas partes vayan a compartir su pasión. Dedica un buen tiempo a estar allí, conectarte allí y crear algo allí.

2. Haz nuevos mapas

Las personas instruidas en la última Era del Descubrimiento cambiaron completamente su mapa mental del mundo para adaptarse a los nuevos desafíos que enfrentaron.

Todavía tenemos mucho camino por recorrer. El principal obstáculo para una idea más precisa de nuestra tierra actual es el lenguaje que usamos para agrupar países y personas. Las dicotomías simples como los mundos "desarrollado" y "en desarrollo", los países "ricos" y "pobres" o las economías "avanzadas" y "emergentes" son totalmente engañosas. Del mismo modo, 'cristiano', 'musulmán', 'judío', 'budista' y 'ateo' son crudos identificadores que a menudo hacen más para aislarnos que para ayudarnos a encontrarnos. Las democracias islámicas en Turquía, Senegal, Indonesia y en otros lugares, y la limpieza étnica budista en Myanmar, desmienten nuestros intentos de codificar por color a las personas basándose en la fe.

3. Atrévete a fallar

Maquiavelo, una lumbrera del último Renacimiento, enseñó a sus compañeros que, en medio del caos y la incertidumbre, el curso más prudente suele ser arriesgarse.

¿Por qué? Porque la acción audaz es lo que saca a las personas de los malos hábitos que se han vuelto peligrosamente anticuados. Audacity es lo que produce nuevos descubrimientos que obligan a las personas a actualizar su conciencia y mantener el ritmo de un mundo que cambia rápidamente. Y es lo que alimenta la confianza del público en sus líderes, y les da esperanza de que estos últimos puedan guiarlos a través de las tormentas que se avecinan.

Hoy necesitamos más de todas las cosas que trae la osadía, pero especialmente la confianza y la esperanza. En este punto, solo las acciones audaces convencerán a un público cada vez más escéptico de que nuestro enredo creciente puede servir para fines positivos, en lugar de simplemente exponernos a todos a un mayor estrés y peligro.

Cada uno de nosotros tiene la azarosa fortuna de haber nacido en un momento histórico, un momento decisivo, en el que las decisiones que tomamos en nuestra vida dictarán las circunstancias de muchas, muchas vidas por venir.

Al adoptar la perspectiva correcta, podemos hacer que esas elecciones sean buenas.