1 de cada 10 niños con TDAH

Un estudio reciente del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) muestra que casi 1 de cada 10 niños en los EE. UU. Actualmente reciben un diagnóstico de TDAH. Entre 2003 y 2007, tan solo 4 años, el porcentaje de niños diagnosticados con TDAH aumentó de 7.8% a 9.5%. En base a mis observaciones, este aumento es probablemente debido a diagnósticos descuidados.

Demasiados pediatras y psiquiatras no logran descartar las causas más obvias de déficits de atención como la falta de sueño, demasiado estrés en la escuela, conflictos familiares, déficit de habilidades en la escuela o mala nutrición, entre muchas otras causas probables de déficit de atención en los niños.

El hallazgo de que el diagnóstico de adolescentes aumentó más en los últimos cuatro años es probable que se deba a que los psiquiatras no tienen en cuenta los déficits de motivación y atención que se producen de forma predecible en la pubertad normal. La mayoría de nosotros puede imaginarse fácilmente por qué los adolescentes perderían la atención por el trabajo escolar.

Además, hay otras tendencias en las escuelas que pueden conducir a este aumento a nivel nacional en la tasa de diagnóstico de TDAH. Algunos ejemplos incluyen:

1. Que Ningún Niño se Quede Atrás ha llevado a un aumento en la enseñanza para la prueba, haciendo que la escuela sea menos atractiva para los estudiantes que les resulta más difícil prestar atención.
2. El aumento de la presión para los resultados de las pruebas aumenta la referencia de los maestros para el TDAH para obtener medicamentos para mejorar los puntajes de las pruebas.
3. La desinformación lleva a los padres a creer que los medicamentos son potenciadores universales del desempeño, lo que los lleva a buscar tratamiento con medicamentos para mejorar las calificaciones escolares.

Consulte las futuras publicaciones de blog para obtener sugerencias y herramientas para garantizar que el niño reciba una evaluación confiable. Como ejemplo, a menudo recomiendo que las familias reciban un curso de terapia de 12 semanas, que incluye entrenamiento para padres, para abordar otros problemas que pueden verse como TDAH antes de que se evalúen. El tratamiento puede resolver problemas mientras se desarrolla la inteligencia emocional en el niño y, o bien conduce a la mejora o al menos aumenta la precisión de la evaluación mediante la resolución de explicaciones alternativas para el comportamiento impulsivo y la falta de concentración.