Los desgloses de relación están infravalorados

Caer, levantarse.

JUrban/Pixabay

Fuente: JUrban / Pixabay

Los matrimonios ejemplares que conocemos han sido ganados. Estas relaciones son verdaderas alianzas, construidas sobre los cimientos de la confianza duramente adquirida que se acumula con el tiempo. Las luchas y los esfuerzos para reconciliar lo que a menudo pueden parecer diferencias imposibles crean la base para estos matrimonios. Si bien la compatibilidad y los intereses compartidos nos unen inicialmente, no son suficientes para mantenernos unidos a lo largo del tiempo. Si no hay averías, no hay suficiente fricción y agitación para impulsar el desarrollo.

No necesitamos buscar estrés; la vida nos lo trae bien. Invariablemente, surgen obstáculos que los amantes deben superar. Los desafíos varían desde la desaprobación de la unión por parte de la familia a problemas de salud o dificultades financieras, pasando por diferentes estilos, valores y sistemas de creencias. A medida que la pareja comprometida se enfrenta a estos desafíos con sus recursos combinados, la relación se vuelve más fuerte y más resistente.

Eventos significativos se unen y se acumulan a lo largo de los años: un toque suave para consolarnos cuando estamos agitados, una conversación íntima, una risa compartida, una taza de té cuando estamos exhaustos, un plato de sopa cuando estamos enfermos, cuidado especial para hacer la experiencia sexual es extraordinariamente emocionante, muestra de orgullo por los logros de nuestro compañero, actos de perdón y todos los preciosos momentos de conexión, comprensión, compasión y comprensión. Estas interacciones son los cimientos de un gran amor erigido a lo largo del tiempo.

Una de las cosas más importantes que podemos hacer para mantener nuestra relación fuerte y saludable es construir el vínculo de afecto. Comienza como una cuerda delgada y crece cada vez más grueso y más fuerte. Cuando las tensiones inevitables de la vida nos sobrevienen en forma de diferencias y desilusiones, la cuerda puede deshilacharse.

Gradualmente, con la elección consciente, el compromiso y la intención, podemos reparar el cordón de conexión con actos sinceros de consideración, generosidad y bondad a diario.

Crear un almacén de buena voluntad en la relación es como poner dinero en el banco. Estos depósitos pueden tomar muchas formas: una conversación, un episodio de resolver diferencias, una mirada persistente o una sincera expresión de gratitud, pero todos tienen el objetivo común de reafirmar nuestro amor y compromiso, y se acumulan en un gran recuento. Cuando hay una cuenta abundante, puede hacer retiros cuando los tiempos son difíciles, y vive la vida con tranquilidad, saboreando una creciente riqueza emocional.