Niños separados de los padres

¿Quién pagará por este crimen?

¿Qué consecuencias enfrentaría un padre si obligara a su propio hijo a vivir en una jaula? Sus acciones se considerarían abuso y negligencia infantil, ¡y tal conducta es condenada por nuestras instituciones!

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Child Ponerse en peligro se refiere a un acto u omisión que hace que un niño sufra abuso psicológico, emocional o físico. El abuso infantil basado en la ofensa de poner en peligro a un niño es normalmente un delito menor, pero poner en peligro la enfermedad mental o una enfermedad o lesión física grave es un delito grave. ¿Este abuso infantil institucionalizado? ¿Quién pagará por este crimen?

Quitar a un niño de sus padres puede ser una tortura psicológica para el niño. Todavía recuerdo historias e imágenes del Holocausto donde los niños fueron separados de sus padres. Muchos sobrevivientes informaron que permanecieron ansiosos y disfuncionales por el resto de sus vidas, y cantidades incalculables lucharon con ansiedad y depresión de por vida. Recuerdo cómo el mundo repudió tales atrocidades.

La separación de un padre o cuidador, o incluso la idea de una separación, expone a los niños pequeños al estrés y al trauma. Se ha descubierto que los niños que han sido separados de sus padres experimentan una variedad de problemas conductuales y emocionales, que incluyen falta de apetito, sueño interrumpido, ansiedad, abstinencia y aferramiento, y son particularmente vulnerables a los efectos negativos del estrés intensificado porque están en un período crítico de desarrollo.

Los investigadores han examinado los problemas de salud mental relacionados con las separaciones familiares forzadas. Han descubierto una gran cantidad de problemas que han tenido un impacto negativo en los niños y han causado o exacerbado problemas de salud mental, como trastornos depresivos o de ansiedad. El desarrollo emocional y social de estos niños se ve afectado y es más probable que experimenten desafíos con el comportamiento, la regulación emocional, la salud física y los resultados académicos en el futuro.

El trauma en la primera infancia, como la separación de un padre, más probablemente afecte la salud del niño, las habilidades cognitivas y la capacidad de aprender. Los efectos de tales traumas infantiles pueden ser duraderos, ya que la capacidad del niño para buscar un mejor empleo durante la vida adulta también se ve afectada con frecuencia. Este resultado negativo puede reducir las perspectivas de trabajo e inhibir la capacidad de alcanzar su máximo potencial en la escuela y el trabajo, lo que representa una oportunidad perdida para la economía.

Una de las cuestiones a las que deberá enfrentarse un niño separado en la frontera es su percepción de que el mundo no es un lugar seguro en el que vivir. Para desarrollarse emocionalmente sano, un niño necesita saber que puede confiar y confiar en sus padres. Cuando un padre no puede proteger a su hijo porque alguien con un uniforme lo saca de los brazos de sus padres, el mundo se vuelve inseguro, caótico, confuso y peligroso para el niño, incluso cuando el niño recibe el mejor refugio (que sabemos no es el caso).

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La sensación resultante de impotencia probablemente hará que un niño desconfíe de sus propios padres por no poder protegerlos contra extraños. El niño también desconfiará de lo que perciben como un mundo confuso y caótico. Esto llevará al niño a actuar en consecuencia y a desconfiar de los demás más adelante en la vida. Las consecuencias a largo plazo variarán de acuerdo con la experiencia y la resistencia del niño individual.

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