Recupere su motivación volviendo a encuadrar las cosas pequeñas

Es fácil desanimarse con una larga lista de cosas aparentemente triviales que hacer cuando un gran objetivo se avecina lejos, muy lejos en el horizonte. Si has estado allí (y la mayoría de nosotros lo hemos hecho), no te preocupes: es natural empantanarse en las malas hierbas de una larga lista de tareas pendientes que parecen, por sí mismas, sin importancia para lograr el objetivo más amplio.

Como tantas otras cosas en la vida, adoptar la mentalidad adecuada es todo, y es la palabra "aparentemente" la clave aquí. La investigación ha demostrado que la falta de motivación para hacer frente a las tareas mundanas se puede disipar colocando mentalmente estas cosas en el contexto más amplio de estar al servicio del objetivo final. En otras palabras, ver el "panorama general" y vincular conscientemente los pequeños trabajos con el más grande puede producir grandes aumentos en la motivación. Si necesitas hacerlo visualmente, ve por ello. Haga un diagrama de flujo, un mapa, cualquier cosa que ayude a refundir las tareas bajo una nueva luz para encender su voluntad de conquistarlas.

Esta idea se relaciona con el fenómeno conocido como el "Objetivo se centra en un efecto mayor". Los investigadores han establecido desde hace tiempo que la motivación para alcanzar un objetivo aumenta cuanto más se llega a lograrla. Esto es el resultado de una acción inconsciente en nuestro cerebro que elimina los bloqueos de nuestra energía cuando nos damos cuenta de que un objetivo es de hecho alcanzable y que nuestros recursos finitos de concentración y energía probablemente no se desperdicien en su búsqueda.

Este principio también ha sido documentado en lo que los investigadores Teresa Amabile y Steven Kramer llaman "El Principio de Progreso". Después del análisis sistemático de casi 12,000 entradas diarias proporcionadas por 238 empleados en 7 compañías, llegaron a una conclusión clara: las tareas diarias aparentemente insignificantes pueden socavar fácilmente nuestro impulso. Pero cuando se avanza hacia adelante en lo que consideramos un trabajo significativo, se genera un valioso impulso que puede inspirarnos a seguir escamoteando.

Por supuesto, siempre existe la tentación de ajustar el plazo para tareas aparentemente inocuas o inconvenientes. Poseemos un poderoso instinto inconsciente para posponer las cosas, en gran parte arraigado en el impulso de conservar nuestras energías finitas. Pero esta tentación puede minarnos seriamente. De hecho, retrasar las fechas límite solo aumenta su distancia desde el final del viaje, lo que resulta en un reverso que mina la motivación de "Goal Looms Larger Effect".

En pocas palabras: volver a enmarcar las cosas pequeñas como tareas importantes que contribuyen a alcanzar el objetivo más amplio puede ayudarnos a generar el impulso mental necesario para hacer frente a los puestos de trabajo. Piense en esto como física elemental: las fuerzas emocionales de la inercia y el impulso se refuerzan a sí mismas. La energía tiende a producir su propio impulso. Aproveche correctamente y puede llevarlo a donde necesita ir.

Por lo tanto, ignore la tentación de posponer las cosas y trate de acumular esos elementos tachados en la lista de tareas pendientes. Eventualmente alcanzarás la masa crítica necesaria para liberarte de la gravedad emocional que te agobia. Esto permitirá que la "Meta tenga un efecto mayor" se active y te infunda los recursos adicionales que necesitarás para cruzar la línea de llegada.