El poder de tomar tiempo libre

La comprobación constante del dispositivo se parece mucho a una adicción.

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¿Trabajas todo el día, solo porque puedes?

Si es así, no estás solo. En estos días, revisamos nuestros teléfonos inteligentes (y computadoras portátiles) constantemente para disminuir nuestra ansiedad de que nos estamos perdiendo algo. ¿Se supone que debemos estar respondiendo a algo urgente en el trabajo? ¿Y si alguien llama por algo realmente importante? La comprobación constante del dispositivo se parece mucho a una adicción (o trastorno obsesivo-compulsivo). Un estudio encontró que muchas personas responden a las “vibraciones del teléfono fantasma”: creen que sienten que su teléfono vibra incluso cuando no lo está.

E incluso si no somos adictos o no revisamos compulsivamente nuestros correos electrónicos, mensajes de texto y feeds, a menudo nuestra salud mental todavía está en juego. Ciertamente, la productividad y la satisfacción con tu vida son.

Por ejemplo, la intervención de Leslie Perlow en la Universidad de Harvard con los ejecutivos de Boston Consulting Group fue nada menos que transformadora. Pidió a los participantes que establecieran un “Tiempo predecible de descanso” (PTO), hora en que no revisarían su correo electrónico o trabajarían de forma remota, por ejemplo, en la mesa de la cena familiar.

La satisfacción laboral y, irónicamente, la productividad se disparó dramáticamente para los ejecutivos de BCG. Antes de establecer PTO, solo el 27 por ciento estaba emocionado de comenzar a trabajar en la mañana. Después de la toma de fuerza, el 51 por ciento fueron. Antes, menos de la mitad estaban satisfechos con su trabajo, pero después, casi las tres cuartas partes estaban satisfechas. La satisfacción con el equilibrio trabajo-vida pasó de 38 por ciento a 54 por ciento. Y la gente encontró que su trabajo era más colaborativo, eficiente y efectivo; por ejemplo, el solo hecho de establecer PTO hizo que el 91 por ciento de los consultores califique a su equipo como colaborativo, en comparación con el 76 por ciento cuando revisaban su correo electrónico a todas horas del día y de la noche.

Perlow explica:

Los gerentes y profesionales ocupados tienden a amplificar, a través de sus propias acciones e interacciones, las presiones inevitables de sus trabajos, haciendo que sus propias vidas y las de sus colegas sean más intensas, más abrumadoras, más exigentes y menos satisfactorias de lo que necesitan. El resultado de este círculo vicioso es que el proceso de trabajo termina siendo menos efectivo y eficiente de lo que podría ser. El poder de la PTO es que rompe este ciclo, mitigando la presión, liberando a las personas para que puedan pasar el tiempo de una manera que sea más deseable para ellos mismos personalmente y para el proceso de trabajo.

A menos que queramos sentirnos abrumados y agotados, necesitamos desconectarnos.

Específicamente, necesitamos dividir los tiempos y espacios que están aislados de los comportamientos de verificación. Esto puede ser muy, muy difícil cuando no viene como un mandato de la compañía, como lo hizo en el Boston Consulting Group. Pero aunque sea difícil y requiera algo de coraje, lo prometo, vale la pena hacerlo.