¿Cómo perdonas incluso cuando se siente imposible? (Parte 2)

Big Stock Images
Fuente: Big Stock Images

Alguien nos lastima de una manera que se siente irreparable y decimos, "Nunca te lo perdonaré". Alguien nos hiere emocional o físicamente y pensamos: "Eso es imperdonable". Sin embargo, constantemente nos dicen que el perdón es vital para nuestra salud mental. ¿Por qué?

Como terapeuta matrimonial y familiar, aconsejo a los pacientes sobre los pormenores del perdón. El perdón es también uno de los temas sobre los que más me preguntan los lectores de Mindful Anger [https://www.psychologytoday.com/blog/mindful-anger]. Lo que a menudo escucho de personas escépticas sobre el perdón es que ciertas cosas parecen imperdonables, ciertas personas no merecen perdón, y que incluso el concepto de perdón parece una charla muy hippy reservada para terapeutas y líderes espirituales.

Explicaré a qué me refiero cuando uso la palabra "perdonar", por qué recomiendo el poder sanador del perdón y cómo sanar, incluso cuando no sientes que puedes perdonar a la persona que te lastimó.

1. ¿Qué es el perdón?

El perdón es dejar ir un agravio o juicio que tienes en contra de alguien más. Cuando lo perdonas, también dejas ir los sentimientos de amargura, resentimiento y venganza.

Muchas personas tienen dificultades con la palabra "perdón". Imaginamos que el perdón implica decir: "Te perdono" e incluye un abrazo, una palmadita en la espalda o una bendición. Eso puede ser verdad algunas veces, pero no todo el tiempo. El perdón no tiene que involucrar a la otra persona y no es para su beneficio. (Para aprender más sobre lo que es y lo que no es el perdón, lea la primera parte: ¿Cómo perdonas incluso cuando se siente imposible?

Si le molesta la palabra "perdón", no tiene que usarla (o podría inventar una nueva). Procesar el trauma emocional y liberar viejas heridas es más que una sola palabra.

2. ¿Por qué debería perdonar?

Muchos estudios han demostrado que practicar el perdón es bueno para su salud emocional y física (aquí hay un artículo interesante sobre la Ciencia del Perdón).

Ira, amargura, odio: estas emociones pesan mucho en su cuerpo y en sus pensamientos. Cuando no procesas y liberas tus emociones, quedan atrapadas dentro de ti y pueden causar dolencias físicas como dolores de estómago y presión arterial alta y pueden empeorar la depresión y la ansiedad. Cuando perdonas y dejas ir un agravio, estás liberando tu cuerpo y tu mente. El perdón no es la única manera de soltar las emociones negativas, pero es uno de los mejores.

3. ¿Tengo que perdonar?

Creo que el perdón puede ser útil para muchos y la capacidad del perdón para sanar tus heridas puede sorprenderte si lo intentas. Pero forzarse a sí mismo a perdonar antes de que esté listo en realidad podría profundizar sus sentimientos de trauma y enojo. No dejes que nadie (¡incluyéndome a mí!) Intente convencerte de que perdones cuando no estés preparado o no quieras hacerlo. No estás roto solo porque no estás bien perdonando las fechorías de otra persona.

4. Entonces, ¿cómo lo hago?

Un ejercicio simple que hago con mis pacientes es un ejercicio de escritura de cartas. Encuentre un espacio tranquilo, un tiempo ininterrumpido, y un bolígrafo o lápiz y papel. Escribe una carta a la persona que te lastimó. Escriba sus sentimientos, sus pensamientos, sus experiencias y su enojo. Recuerde, esta carta es para usted. Nadie más tiene que leerlo.

Ahora, intenta escribir una segunda carta con tu otra mano. Escribir con la mano que no domina (es decir, con la mano izquierda si usualmente es diestro) puede ayudar a anular la parte analítica y crítica de su cerebro. Puede encontrar que su escritura es más libre y más honesta emocionalmente de esta manera.

Quieres que todas las emociones que has embotellado se muevan y fluyan por tu pluma. Imagine toda su ira, amargura, resentimiento y tristeza moviéndose desde lo más profundo de su cuerpo a la página. Incluso si no cree que alguna vez pueda perdonar o no quiera hacerlo, un ejercicio de escritura como este puede ayudarlo a recuperar el control de los pensamientos perturbadores y negativos.

Cuando alguien nos lastima, es normal aferrarse a sentimientos de ira y resentimiento y querer vengarse. Pero, cuando nos aferramos a nuestra ira porque se siente justificada, no podemos sanar. Ya sea que sienta o no que el perdón puede ser parte de su proceso de curación, el proceso de curación en sí mismo es vital. Mientras sanas, mantén la atención en ti mismo. Concéntrese en lo que puede hacer para mejorar su vida y su integridad.

Para aprender más sobre el perdón y cómo vivir tu mejor vida, visita mi sitio web o únete a mí en uno de mis próximos Talleres de Ira Consciente.