¿Qué tipo de Dieter eres?

¿Podríamos dejar de culpar a cada dieta fallida del hambre, los antojos o la falta de fuerza de voluntad? Según una escuela de comportamiento, son las distorsiones cognitivas las que se interponen en nuestro camino. Si el objetivo es comer más saludable para perder unas pocas libras o para evitar algunas enfermedades asociadas con el estilo de vida (como las enfermedades cardiovasculares y la diabetes, por ejemplo), ¿cuál de los siguientes seis tipos de diálogo interno se interpone en su camino?

EL PENSADOR DE TODO O NADA

Esta persona resume cada evento en totalidades. O todo se describe como bueno o todo apesta en algunos días. Este tipo de pensador extremo coloca la mayoría de los eventos en categorías de siempre o nunca. Cuando se trata de comida, un deslizamiento, por ejemplo, una cucharada de mantequilla en la tostada en la mañana en lugar de mantequilla de maní rica en proteínas, comienza una espiral descendente de mal comer durante todo el resto del día.

EL FILTRO MENTAL

¿Solo vislumbraste la más mínima imperfección en ti mismo (o incluso en un proyecto en el que estás trabajando)? Si tiende a obsesionarse con esto, puede caer dentro de esta categoría de distorsión cognitiva. Una vez que este tipo de pensador extremo ve un defecto percibido, él o ella vive tan intensamente sobre él que los otros objetivos se vuelven secundarios o incluso inconsecuentes. ¿De qué sirve ordenar la ensalada en lugar de la hamburguesa con queso, según la línea de pensamiento, cuando estos jeans parecen más ajustados hoy de todos modos?

EL JUMPER DE CONCLUSIÓN

Hay dos tipos de conclusiones a las que puede llegar este tipo de pensador. Existe el lector de ideas, que asume saber siempre lo que otros piensan, o el adivino, que está seguro de conocer el resultado de cada evento antes de que suceda. Este es el tipo de persona que es muy susceptible a los atracones en un buffet, por ejemplo. ¿Por qué no sumergirse en los artículos de alta cal y grasa? Después de todo, él o ella está seguro de que la comida terminará de esa manera de todos modos.

EL RAZON EMOCIONAL

Esta persona toma decisiones impulsivamente basadas en la intuición, en lugar de la realidad objetiva. Es difícil mantener un plan de alimentación saludable cuando la espontaneidad y las emociones superan el pensamiento razonado.

A SHOULDA THINKER

Este tipo de persona sabe muy bien cómo comer mejor e incluso presenta una indiscreción menor con un "deber" como, "Debería tener el pescado a la parrilla pero en su lugar tomaré el Porterhouse". Hay un preámbulo inherente a una excusa en esta declaración. Este tipo de pensador también percibe esta declaración de "debería" como una forma de salir legítimamente de un momento de fuerza de voluntad difícil.

EL ETIQUETADOR

Finalmente, esta categoría de dieta frustrante es rápida para categorizar personas o escenarios con una declaración general. La descripción de una persona o situación en unas pocas palabras de elección permite que este tipo de pensador juzgue rápidamente, sin el análisis adecuado o preciso. En términos de hábitos alimenticios, The Labeler puede ceder a una situación tentadora cuando es demasiado rápido para evaluar el entorno en el que se encuentra la comida e ignorar sus propias necesidades.

¿Qué clase de comedor eres tú? En mi próximo post, abordaré cómo reestructurar cognitivamente estos diversos procesos de pensamiento.