Cómo motivar a los niños a través del propósito

Las conferencias de padres y maestros se llevan a cabo en esta época del año. Este puede ser un momento estresante para padres e hijos. Cuando los padres asisten a estas reuniones y se dan cuenta de que a su hijo no le está yendo bien, a menudo no saben cómo ayudar a su hijo a mejorar. Los maestros pueden decir cosas como "Necesita aprender sus operaciones matemáticas" o "Necesita hacer su tarea". Desafortunadamente para muchos padres el simple hecho de aprender acerca de las áreas en las que su hijo tiene dificultades no es suficiente para saber automáticamente qué hacer a continuación o cómo ayudar a que su hijo sea más exitoso.

Hay diferentes maneras de "motivar" a los niños para que se conviertan en mejores estudiantes. Los estudios apoyan la idea de que los padres y otras personas motivan a los niños con más éxito al crear una atmósfera que promueva la automotivación. Esto requiere encontrar el "gancho" para aprender que resuena para ese estudiante en particular.

Algunos padres creen que las tácticas de intimidación y miedo para ayudar a motivar a los niños funcionan mejor. Esto puede funcionar en el corto plazo, pero ciertamente no mantendrá la motivación y eventualmente puede generar resentimiento. Este es el método de crianza "hágalo o no" y muchos niños de fuerte voluntad se rebelan contra este enfoque. Intentar forzar al niño para que haga lo que se espera crea una serie de luchas de poder que interferirán con la conexión entre padres e hijos y probablemente no produzcan el resultado deseado.

Otro enfoque es sobornar a los niños para mejorar el rendimiento a través de recompensas y consecuencias. En este enfoque, los padres pueden ofrecer pagar a los niños para obtener mejores calificaciones. Esto puede dar como resultado el resultado deseado a corto plazo, pero ¿qué sucede una vez que se eliminan las recompensas? Estos niños crecerán esperando un premio por su desempeño en lugar de experimentar recompensas internas por el trabajo duro y los posteriores resultados positivos.

La forma más efectiva de ayudar a los niños a alcanzar sus metas y motivarse internamente es enseñarles sobre el propósito. Los seres humanos son naturalmente curiosos y, por lo tanto, hacer la conexión entre el valor intrínseco del aprendizaje y el propósito no es difícil, especialmente cuando las calificaciones y el rendimiento no son demasiado enfatizados y el aprendizaje se ve como el objetivo final. Al ayudar a los niños a participar más en el aprendizaje y, por lo tanto, a mejorar a los alumnos, los padres ayudan a los niños a comprender cómo y por qué el aprendizaje es importante para ellos.

Si bien puede parecer desalentador motivar a los niños mediante la enseñanza de cómo el aprendizaje se relaciona con su propio propósito interno, hacer esto les enseña a los niños a hacerse cargo de sus elecciones y comportamiento. Es una solución a largo plazo y no una solución rápida o de corto plazo.

Aquí hay cuatro formas de proceder:

1. Propósito del modelo de rol. Los padres que desean motivar a los niños a través de un propósito interno tendrán una ventaja cuando puedan demostrar esto a través de sus propias acciones. En pocas palabras, vive una vida intencional donde el trabajo duro y el esfuerzo resultan en una sensación positiva, incluso cuando los objetivos no siempre se cumplen la primera vez o rápidamente.

2. Establezca el propósito. Haga que su hijo defina quién quiere ser y cómo quiere vivir y ayúdelo a identificar cómo puede lograrlo a través de sus acciones diarias y lo que necesita aprender para lograr sus sueños.

3. Explica el por qué Algunos niños no siempre harán la conexión entre la tarea de geometría y alcanzar su meta de ser un pensador fuerte o ingresar a la universidad o desarrollar otras habilidades prácticas de la vida. Los padres deben llenar los vacíos y establecer las conexiones sobre por qué y cómo ciertas actividades son esenciales para que puedan alcanzar sus objetivos de vida más amplios.

4. Reflexiona hacia atrás. Cuando su hijo demuestre un trabajo arduo, incluso haciendo algo tan simple como ayudarlo a llevar las compras, recuérdeles de una manera que les permita ver sus propias habilidades. Puedes decir algo como "Esas bolsas de supermercado son pesadas y estoy sorprendido de que puedas llevarlas dentro". Esto le permite al niño hacer la atribución internamente entre su comportamiento y su fuerza física, lo que da como resultado pensamientos como "Soy realmente fuerte", que vienen de dentro y no de fuera de ellos mismos.

Los padres pueden desanimarse cuando se enteran de que su hijo tiene un rendimiento inferior en la escuela. Tan difícil como es enfrentar el bajo rendimiento, es una oportunidad para enfocarse en el carácter de un niño y ayudarlo a desarrollar una motivación interna que le servirá mucho más allá del trabajo escolar y en todos los aspectos de su vida.

Con ganas, DS et al, Universidad de Texas, marzo de 2014, Aburrido pero Importante: Un Propósito Autotranscendente para el Aprendizaje fomenta la autorregulación académica.