Cómo encuentra tu cerebro el significado de las experiencias de la vida

¿Las historias tienen el poder de ayudarnos a prosperar?

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¿Cómo descubres tú, tus hijos y tus alumnos el significado de las experiencias de la vida cotidiana? ¿Cómo damos sentido a las palabras, los eventos y las relaciones?

Según un estudio pionero, los investigadores de la Universidad del Sur de California identificaron las regiones del cerebro donde los humanos adquieren significado al interpretar historias de vida (Dehghani et al., 2017).

Los psicólogos y los investigadores narrativos han sabido por mucho tiempo que las historias son el núcleo de la creación de significado y juegan un papel importante en la forma en que entendemos el mundo que nos rodea. Por primera vez, los neurocientíficos han mapeado regiones del cerebro, mientras que los participantes de tres orígenes étnicos fueron expuestos a narrativas significativas.

Esta investigación fue compleja y sofisticada. Los investigadores clasificaron más de veinte millones de publicaciones en blogs en inglés de historias personales y las redujeron a cuarenta temas. Cada tema fue condensado en un párrafo antes de ser traducido al chino mandarín y al farsi. Luego, los párrafos fueron traducidos al inglés.

La traducción de historias en tres idiomas se realizó para explorar patrones de activación cerebral a través de los idiomas. 90 participantes fueron divididos por igual entre estadounidenses, chinos e iraníes.

Cuando los participantes leyeron las cuarenta historias diferentes, sus cerebros se escanearon con una resonancia magnética funcional. El estudio encontró algo extraordinariamente universal sobre cómo las personas procesan historias, independientemente de su alfabeto o idioma. De hecho, los investigadores descubrieron que la parte del cerebro llamada red de modo predeterminado (DMN) está involucrada en el significado y la comprensión de alto nivel.

Antes de este estudio, el DMN había sido identificado por los investigadores como un “estado de reposo”, mostrando alta actividad cuando las personas no participaban en tareas enfocadas externamente (Raichle, 2015). También se ha relacionado con “mind-wandering” (Smallwoood & Schooler, 2015) y con la autorreflexión (Qin y Northoff, 2011).

Curiosamente, los psicólogos han descubierto que los “estados de reposo” como la meditación, la autorreflexión y la distracción mental son herramientas que nos ayudan a dar sentido a la vida. De hecho, los investigadores de Harvard descubrieron que las cuentas de ensueño despiertan el cuarenta y siete por ciento de nuestra actividad durante las horas de vigilia. La distracción mental y el soñar despierto también se han relacionado con el pensamiento creativo.

Ahora parece que la DMN del cerebro desempeña un papel importante al reunir estas funciones creativas y de descanso de una manera profundamente profunda y significativa.

El mismo equipo de investigadores de USC descubrió que la actividad en ciertos nodos de DMN aumentó durante el transcurso de una historia y fue mayor cuando las historias contenían valores morales fuertes (Kaplan et al., 2016).

¿Por qué deberían los padres y maestros estar interesados, e incluso un poco entusiasmados, con esta investigación neurocientífica? Porque dar sentido a las experiencias de la vida es cómo los niños crecen y se convierten en adultos sanos, adaptables y afectuosos. Cuanto más descubramos cómo ayudar a los niños a encontrar sentido en la vida, la escuela, las amistades y las actividades, más aprenderán a prosperar.

El poder de contar historias

Una característica distintiva de la narración de historias es que nos exige integrar y encontrar sentido a la información a lo largo del tiempo. Para comprender el significado de una historia, debemos encontrar conexiones: conexiones entre palabras, eventos y relaciones.

El estudio de la USC mostró que la historia trasciende el lenguaje y la cultura. Este conocimiento tiene grandes implicaciones para la crianza de los hijos, la enseñanza, la construcción de la nación y la construcción de la paz. Demuestra que las historias tienen el poder de afectar el desarrollo de atributos como la integridad, la autoconciencia y la empatía. Muestra que los cerebros humanos responden a las historias casi de la misma manera, conectándose a altos niveles de significado.

Esta última investigación en neurociencia refuerza la importancia de compartir historias con niños y adolescentes, y el uso de esas historias para enseñar fortalezas de carácter y formas de descubrir la identidad propia a través de la creación de significado.

Los adultos ayudan a los niños a encontrar significado y propósito cuando hablan sobre películas, libros e historias de sus propias vidas. A través de preguntas profundas, una buena película puede ayudar a dar forma a la identidad de un niño. Las historias ayudan a los niños y adolescentes a ver el mundo de maneras nuevas y diferentes, y los llevan a una acción positiva. Contar historias también es un conducto para el aprendizaje intergeneracional. Las conversaciones entre ancianos y adolescentes que involucran compartir historias de vida tienen el potencial de generar un significado profundo.

Las historias nos ayudan a todos a sentirnos parte de un mundo mucho más grande que nosotros mismos. Cuando las personas pueden relacionarse con altos niveles de significado, pueden salvar las diferencias, eliminar los prejuicios y curar las relaciones heridas.

Referencias

Dehghani, M., Boghrati, R., Man, K., Hoover, J., Gimbel, S., Vaswani, A., … Kaplan, J. (2017, 2 de marzo). Descodificando la representación neuronal de los significados de las historias en todos los idiomas. Obtenido de https://psyarxiv.com/qrpp3

Kaplan, JT, Gimbel, SI, Dehghani, M., Immordino-Yang, MH, Sagae, K., Wong, JD,. . . Damasio, A. (2016). Procesamiento de narrativas sobre valores protegidos: una investigación intercultural de correlatos neuronales. Cerebral Cortex, bhv325.

Price-Mitchell, M. (2017, 29 de diciembre). Soñar despierto: ¿sin sentido o significativo? [Entrada en el blog]. Retreived de https://www.rootsofaction.com/daydreaming-mindless-or-meaningful/

Qin, P., y Northoff, G. (2011). ¿Cómo se relaciona nuestro yo con las regiones de la línea media y la red en modo predeterminado? Neuroimage , 57 (3), 1221-1233.

Raichle, ME (2015). La red de modo predeterminado del cerebro. Revisión anual de la neurociencia, 38, 433-447.

Smallwood, J., & Schooler, JW (2015). La ciencia de la mente vagando: navegando empíricamente la corriente de la conciencia. Revisión anual de psicología, 66, 487-518.