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Es difícil enseñar a los niños la perseverancia y la fuerza mental en el mundo moderno. La tecnología permite una gratificación instantánea y nuestros dispositivos digitales ofrecen un escape fácil cuando las cosas se ponen difíciles.
Los niños tienen períodos de atención más cortos y menos paciencia que nunca cuando las cosas no van bien. La buena noticia es que la perseverancia es una habilidad que se puede aprender, incluso en la era de la electrónica.
Aunque hay muchos ejercicios de fuerza mental que enseñarán a sus hijos a mantener el rumbo, el efecto Batman es una manera divertida y sencilla de mostrarles a los niños que son más fuertes de lo que piensan.
¿Por qué querría poder continuar cuando algo es doloroso, aburrido o frustrante? Bueno, los estudios muestran que las personas con perseverancia obtienen mejores resultados en casi todas las áreas de sus vidas.
Un estudio de 2003 publicado en el Journal of Leadership & Organizational Studies descubrió que la capacidad de superar el malestar está relacionada con una mayor inteligencia, más logros académicos y un mejor rendimiento laboral.
Sin perseverancia, los niños pueden crecer y convertirse en adultos que abandonan cada vez que enfrentan un desafío. Eso puede significar renunciar a un trabajo cuando no obtienen la primera promoción que buscan o terminar relaciones cada vez que encuentran dificultades de comunicación.
Decirle a su hijo que se haga pasar por Batman, Dora la Exploradora, Bob the Builder u otro personaje trabajador podría aumentar su capacidad de perseverar, según un estudio de 2016 publicado en Child Development .
Los investigadores probaron esta teoría en niños de 4 y 6 años. Les asignaron a todos los niños una tarea aburrida en una computadora.
A los niños se les dijo que trabajaran tanto y tan duro como pudieran, y se les advirtió que la tarea sería aburrida. Pero también les dijeron que podían tomarse un descanso cada vez que querían jugar un juego divertido en una tableta.
Los niños fueron divididos en tres grupos:
Los niños que se referían a sí mismos en primera persona se tomaron la mayor cantidad de descansos y tuvieron problemas para superar la tarea. Los niños que se referían a sí mismos en tercera persona lo hicieron un poco mejor, muy probablemente porque pudieron separarse de sus emociones al referirse a sí mismos en tercera persona.
El tercer grupo realizó el mejor. Los investigadores sospechan que asumir las características de un personaje trabajador les dio la confianza de que podrían seguir adelante.
Ya sea que trates de motivar a tu hijo para que limpie su habitación o estás intentando que termine su tarea, el efecto Batman podría darle la ventaja que necesita.
Identifique uno de los personajes favoritos de su hijo: asegúrese de que sea alguien que trabaje duro, como Rapunzel. Luego di: “Finge ser Rapunzel y haz tu trabajo de la misma manera que Rapunzel lo haría”.
Compruébalo periódicamente preguntándole: “¿Cómo va todo esto, Rapunzel?”. Es probable que descubra que puede desempeñarse mejor de lo normal.
Cada vez que su hijo persista con éxito, ella desarrollará la fuerza mental que necesita para hacer cosas difíciles. Y cuanto más confiada se vuelva, más desafíos enfrentará.