¿Qué motiva a las personas a tomar riesgos para la salud?

Dada nuestra fuerte inclinación hacia la autopreservación, puede ser difícil entender por qué las personas hacen cosas que a sabiendas ponen en riesgo su salud y seguridad. Sin embargo, sucede todo el tiempo, especialmente entre adolescentes y adultos jóvenes.

Una explicación proviene de la psicología social. La investigación sobre la autopresentación sugiere que las personas controlen las percepciones de los demás sobre ellos y se esfuercen por presentar autoimágenes que susciten evaluaciones positivas. En otras palabras, por mucho que podamos decir que no, nos importa lo que otras personas piensen de nosotros y quieran causar una buena impresión.

Para examinar cómo los motivos de la autopresentación tienen un impacto en el comportamiento de la salud, los investigadores realizaron una encuesta de primer año de la universidad. Al final del primer semestre, se les preguntó a los participantes si habían participado en 10 conductas de riesgo de salud con el objetivo de impresionar a los demás: consumo de alcohol, uso de drogas, uso de tabaco, conducción imprudente, conducir bajo los efectos de drogas o alcohol, viajar con un conductor que estaba bajo la influencia, tener relaciones sexuales sin protección, peleas físicas, acrobacias peligrosas y levantar peso excesivo en el gimnasio. Para cada comportamiento, los participantes indicaron cuál de las siguientes imágenes intentaban presentar: cool / relajado, divertido / social, valiente / aventurero, físicamente atractivo o maduro.

Los resultados mostraron que las tres cuartas partes de los participantes informaron haber realizado al menos uno de los comportamientos en un intento de causar una impresión deseada en los demás. Los comportamientos más comunes eran el consumo de alcohol, la conducción peligrosa y el tabaquismo (entre los hombres, las acrobacias y el levantamiento excesivo también eran relativamente frecuentes).

Los participantes informaron que querían principalmente parecer cool / relajados, valientes / asertivos y divertidos / sociales. Aunque hubo superposiciones en las que los comportamientos se asociaron con las imágenes deseadas, el consumo de alcohol se asoció más a menudo con el deseo de parecer divertido y social, mientras que fumar a menudo estaba relacionado con el deseo de parecer fresco y relajado.

¿Fueron estos comportamientos riesgosos efectivos para obtener las impresiones deseadas? En promedio, los participantes percibieron sus esfuerzos para tener un éxito moderado, aunque no está claro si otras personas compartirían estas percepciones. En algunos casos, los intentos de autopresentación claramente fracasaron. Por ejemplo, una participante describió una situación en la que bebió demasiado y luego vomitó frente a otras personas.

Los motivos de autopresentación también pueden ser contraproducentes cuando son demasiado obvios. Puede que las personas quieran parecer divertidas y divertidas, pero no quieren parecer que están tratando de parecer divertidas y divertidas. Aquellos que llegan a extremos peligrosos para obtener la aprobación social pueden terminar pareciendo desesperados por la atención, lo contrario de la imagen que intentan transmitir.

Por supuesto, hay muchas otras razones por las cuales las personas se involucran en comportamientos no saludables, incluida la adicción física y la reducción del estrés. Pero en la medida en que las inquietudes de la autopresentación pueden desempeñar un papel, las intervenciones de promoción de la salud pueden ser más efectivas cuando toman en cuenta estas preocupaciones. Por ejemplo, cuando los programas de educación sobre las drogas se centran en los riesgos para la salud que conlleva el consumo de drogas, pueden hacer que el comportamiento sea más atractivo para aquellos que quieren parecer valientes y rebeldes.

Si bien los comportamientos imprudentes pueden ser más comunes en los adolescentes, también pueden ocurrir en adultos: solo tienden a adoptar diferentes formas, como no buscar tratamiento para un problema de salud para evitar la vergüenza o intentar realizar una tarea física peligrosa, como levantar un mueble pesado solo, para parecer fuerte y autosuficiente.

Las preocupaciones de la autopresentación también pueden representar un obstáculo para una alimentación saludable. Puede ser incómodo rechazar el postre en una fiesta de cumpleaños si tiene una dieta de bajo índice glucémico o pedir una ensalada cuando todos los demás toman hamburguesas y papas fritas. Además, la investigación sugiere que las mujeres son más propensas a no tratar delante de los hombres para presentar una imagen femenina, mientras que los hombres son más propensos a comer en exceso para mostrar su virilidad.

Puede que no sea posible (o deseable) dejar de preocuparse por lo que otras personas piensan. Pero a veces estas preocupaciones se sienten más importantes en el momento de lo que serán a largo plazo. Al dar un paso atrás y reflexionar sobre nuestros objetivos de orden superior (por ejemplo, evitar un accidente automovilístico, prevenir una enfermedad grave o una lesión), podríamos tomar decisiones más saludables.