5 razones por las cuales mueren tantas relaciones

Así es cómo evitar los mortíferos asesinos de la intimidad.

Olena Yakobchuk/Shutterstock

Fuente: Olena Yakobchuk / Shutterstock

La mayoría de las relaciones íntimas fracasan y se vuelven amargas y conflictivas. Las estadísticas muestran que solo tres de cada diez matrimonios permanecen estables, saludables y felices. ¿Por qué algunas relaciones están más condenadas que otras? Enlazado de la relación terminal.

El bloqueo ocurre cuando ignoramos por completo lo que nuestros socios pueden pensar o sentir sobre cuestiones importantes de relación. Nos atascamos en nuestro propio punto de vista, y no podemos o no queremos considerar el punto de vista de nuestro compañero. Decidimos que estamos en lo cierto, y que nuestros socios están equivocados, comunicamos nuestros sentimientos como hechos y hacemos oídos sordos a los pensamientos y sentimientos de nuestro cónyuge. Decididos a forzar nuestro propio punto de vista, nos comunicamos de manera presuntiva, torpe y paternal. Si eres como la mayoría de las personas, es probable que hayas interactuado con tu pareja a través de uno o más tipos dañinos de “crossovers” o “traspaso verbal” sin darte cuenta:

1. Lectura de la mente.

Lo hacemos cientos de veces al día: inventamos historias sobre una situación sin pruebas. Llegamos a conclusiones sobre lo que nuestro compañero está pensando o haciendo sin verificarlo. Podría decir algo a su pareja como: “Probablemente piense que soy irresponsable porque perdí mi teléfono celular”. Puede eludir esta intrusión simplemente revisándola: “¿Cree que soy irresponsable?”

2. Lectura de emociones.

Concluimos lo que siente nuestro compañero sin preguntar. Podría decir: “Puedo decir que está enojado conmigo porque llego tarde”. Para evitar esta intrusión, pregúntele qué siente: “¿Está enojado conmigo porque llego tarde?”

3. insultos.

Etiquetamos a nuestro compañero o cónyuge con atributos negativos: “Eres mezquino y egoísta”. Para esquivar esta intrusión, da un paso atrás y habla de ti mismo, usando “I-messages” en lugar de “You-messages”: “Me siento incómodo”. con cómo estamos hablando; Me gustaría tomar un descanso y regresar cuando estemos más tranquilos “. Cuando nos referimos a nuestros propios sentimientos (mensajes-I) en lugar de señalar nuestros dedos (mensajes-Yo), reduce la actitud defensiva y la tensión y promueve la apertura diálogo.

4. Olvidaciones.

Criticamos los comportamientos o hábitos de nuestro compañero: “Siempre apila los platos sucios en el fregadero en lugar de ponerlos en el lavavajillas”. Para revertir esta intrusión, intente utilizar “Cuando usted”. . . Siento . . . “Comunicar cómo te hace sentir una determinada acción:” Cuando sigues acumulando platos sucios en el fregadero, me hace sentir que mis pedidos no te importan “.

5. Comandante.

Le decimos a nuestro compañero qué hacer y esperamos que haga lo que nosotros decimos: “No comas eso; es malo para usted “. Para evitar esta intrusión, exprese su preocupación o formule una pregunta:” Estoy pensando en su salud. ¿Quieres que la comida se fríe, o prefieres tener algo a la parrilla?

Con el tiempo, estos cruces provocan que las conexiones íntimas se conviertan en un estado de fracaso de relación. Los estudios del terapeuta familiar John Gottman revelan cuatro señales de alerta de que las rupturas son inminentes: la crítica constante (atacar a nuestros socios) puede llevar a una actitud defensiva (un contraataque) o obstruccionismo (retirarse de la conversación por completo), y finalmente despreciar (mirar por debajo de nuestras narices a nuestros compañeros o resentirlos por no ver nuestro punto de vista).

¿Qué puedes hacer?

Es posible reducir el conflicto interpersonal y mejorar la comunicación evitando el traspaso verbal, manteniendo límites respetuosos y siendo consciente de cómo das y recibes información. Es ciencia simple: los estudios demuestran que la consideración, la amabilidad y la generosidad son la mejor medicina para relaciones íntimas fuertes y sanas. La empatía neutraliza la discordia. Ponerse en los zapatos de su pareja al suspender temporalmente su propia perspectiva agudiza sus habilidades de escucha y profundiza su comprensión de sus pensamientos y sentimientos sin la necesidad de estar de acuerdo o en desacuerdo. Este tipo de escucha activa te involucra en lo que tu pareja dice y siente sin caer en la trampa de quién tiene la razón y quién está equivocado. Suaviza la tensión y prepara el escenario para la cooperación mutua, la colaboración y la conexión amorosa.